Jaime Ostos Jr: "No pararé hasta ver a Jacobo en la cárcel"
El primogénito del torero Jaime Ostos ha denunciado a su hermano pequeño por agresión y daños

Jaime Ostos Jr.
La relación entre Jaime Ostos Jr. y su hermano Jacobo es irrecuperable. El primogénito del torero fallecido califica al hijo de María de los Ángeles Grajal como “una persona violenta” y asegura, tajante, que “quiero verle en la cárcel”.
No duda en su deseo, insiste en que su hermano miente cuando dice que no le agredió y deja latente que “confío plenamente en la Justicia. Me estoy recuperando de su ataque, pero si me llega a dar el golpe unos centímetros más cerca del ojo me lo habría destrozado y habría perdido completamente la visión”.

PRONTO.: Tu madre está muy preocupada…
JAIME OSTOS.: Es natural. ¿Qué madre no se preocupa si le dicen que su hijo ha sido agredido violentamente?
Jaime Ostos Jr.: "Espero que salga pronto el juicio y que le metan en prisión"

P.: Es muy triste que dos hermanos se enfrenten en un juzgado.
J.O.: A ese hombre no le llamo hermano, es simplemente Jacobo. Y te repito que no pararé hasta verle encarcelado. Espero que salga pronto el juicio y que le metan en prisión, que es donde debe estar. La denuncia está muy clara, es por una fuerte agresión y daños.

Jaime Ostos Jr. considera que ese tipo de acciones demuestran que “Jacobo es un cobarde”. Durante su intervención en 'De Viernes', fue muy contundente: “creo que las sustancias que consume le están matando. Toma demasiados esteroides y anabolizantes, se nota. Me da pena”.

P.: ¿Qué te dicen los médicos?
J.O.: Que todo es cuestión de tiempo y que me tengo que recuperar. Todavía tengo el ojo morado y la cara un poco hinchada… también me duele mucho el cuello, pero espero que la evolución no sea lenta y poco a poco vaya para mejor.
P.: ¿Has leído el libro de memorias de tu padre escrito por la doctora Grajal?
J.O.: No he tenido ocasión de leerlo.
P.: Pues tanto tú como tu hermana y tu madre salís muy malparados…
J.O.: De esa mujer no me extraña nada…

P.: Ella insiste en que la amenazaste de muerte cuando os encontrasteis en el hotel Wellington.
J.O.: Y yo insisto en que es mentira. Me metí en el salón para saludar a un antiguo amigo y ella se me acercó por detrás y me pidió que me fuera de allí, y es lo que hice. No proferí amenazas, y menos de muerte, ni insultos.
P.: También dice que fuiste a provocar, que sabías que ella se encontraba allí…
J.O.: Eso es mentira. Fue una casualidad, no tenía ni idea de que Mari Ángeles y Jacobo estaban en ese hotel. Yo, cada vez que vengo desde mi domicilio en Estados Unidos a Madrid, suelo ir al Wellington, que es un hotel que le gustaba mucho a mi padre.