Esta semana nuestro colaborador nos habla de Haya, la princesita que él conoció tras quedar huérfana. Peñafiel recuerda como si fuera hoy aquel mes de febrero de 1977, cuando viajó a Jordania acompañando a don Juan Carlos y doña Sofía. Iban a consolar a su buen amigo el rey Husein tras la horrible muerte de su tercera y amadísima esposa, Alia, que había fallecido hacía tan solo tres días en un accidente de helicóptero.
Tras la muerte de su esposa, el rey Husein «comenzó a resentirse de tal manera que para andar tenía que usar bastón. Es más, supuso un esfuerzo para él levantarse de la cama para recibir a sus amigos Juan Carlos y Sofía», explica el colaborador.
Peñafiel recuerda «con emoción, la despedida». Ya que Haya, que tenía tres años, «preguntaba diariamente por su madre y a quien su padre le explicaba siempre la misma historia: que estaba de viaje».
Los caballos, su pasión y su perdición
El colaborador comenta que la princesa se enamoró de los caballos muy joven y que, en 1992, consiguió su primera medalla. Pero, indica Peñafiel, «los caballos serían su pasión y su perdición, ya que Haya conoció al hombre del que ahora huye, el jeque Mohamed bin Rashid Al Maktum» durante una competición.
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