Inconformista y arrolladoramente sincera, Chenoa se encuentra en un momento de tal plenitud que, a sus 42 años, ya no le importa el qué dirán o quién la pueda juzgar. Por eso, valiente y reveladora en el libro que acaba de publicar («Defectos perfectos»), no se corta a la hora de repasar su biografía ni de contar intimidades como lo mal que lo pasó tras romper con David Bisbal, hace ya 12 años. El almeriense prefiere ser discreto y sólo ha declarado que «en una relación siempre hay dos versiones».