Gloria Camila y su padre, Ortega Cano, nerviosos y enfadados por 'El último viaje de Rocío Jurado'

Ayer, 'Sálvame' desvelaba un bombazo: el próximo martes 14 de diciembre, en lugar de su programa diario habitual, emitirán por la tarde el especial 'El último viaje de Rocío Jurado'. En este programa podremos ver cómo numerosos contenedores que guardan hasta 36 toneladas de objetos personales de la cantante (que Rocío Carrasco había custodiado hasta hoy en un gran almacén), partirán hasta las localizaciones donde va a rodarse 'En el nombre de Rocío', la segunda parte de la docuserie más esperada. Según el programa, entre esos objetos hay desde ropa y esculturas a fotografías, documentos y hasta material musical inédito. 

Esta noticia ha supuesto un inesperado jarro de agua fría tanto para los Mohedano como para los Ortega. Los intentos de Gloria Camila y de José Ortega Cano por frenar la producción de la docuserie de Rocío Carrasco consiguieron retrasar unas semanas la grabación, pero ahora la hija de 'la más grande' está dispuesta a llegar hasta el final para mostrar su verdad sobre su complicada historia familiar. 

En manos del abogado familiar

Según ha revelado el portal Informalia, Gloria Camila habría puesto en manos de Enrique Trebolle, su abogado, este asunto. "No vamos a permitir que se burlen de la justicia", ha declarado el letrado, dando a entender que hará todo lo posible para que las pertenencias de la madre de su clienta no salgan a la luz. Una tarea harto complicada, teniendo en cuenta que esas 36 toneladas de objetos pertenecen legalmente a Rocío Carrasco, su heredera universal...

Ortega Cano, por su parte, ha sido el primero en hablar públicamente sobre este programa especial. Lo ha hecho en el programa de 'Ya son las ocho', usando como su portavoz a Beatriz Cortázar. La periodista reveló que el diestro "no tiene ni idea de lo que hay en esos containers". 

"Yo me fui de la casa de La Moraleja el día que me dijo Rocío Carrasco que me tenía que ir. Me fui de esa casa, pedí una furgoneta de mi cuadrilla, cogí la ropa del armario a puñados, a mis hijos y me fui a La Yerbabuena", le habría dicho el extorero a Cortázar.