Coincidiendo con la celebración de su 30º cumpleaños, el tenista mallorquín y su novia, Xisca Perelló, han pasado unos días de asueto a bordo de su nuevo e impresionante yate, «Beethoven» –de 23 metros de eslora, varios dormitorios con baño, comedor, cocina y distintas zonas de estar–, con el que pusieron rumbo a la vecina isla de Ibiza. Allí la pareja se dedicó a descansar, a tomar el sol y a bañarse en las cálidas aguas del Mediterráneo, mientras Rafa se recupera de la lesión que le obligó a retirarse del Roland Garros, un torneo que ya ha ganado en nueve ocasiones. ¡No te pierdas las fotos más románticas de la jornada, esta semana en tu revista PRONTO!