Adelgaza de forma natural tras los excesos de las Fiestas
Empieza el año con el modo detox activado y sigue una dieta natural, combinada con ejercicio moderado para lograr tu objetivo de adelgazar
Si uno de tus propósitos para Año Nuevo es bajar algunos kilitos, ha llegado el momento de empezar a cumplirlo.
También puede darse el caso de que estas Navidades te hayas excedido con algunos platos y ahora quieras recuperar tu figura, ¡aprende aquí cómo puedes lograrlo!
Adelgazar de forma natural, sin efectos rebote y sin pasar hambre es posible y vamos a enseñarte los mejores trucos para conseguirlo.
¿Preparad@ para cumplir con tu objetivo?
¡Sigue leyendo y anímate!
10 trucos infalibles para combatir los excesos navideños
Sigue estos consejos y dile adiós a esos kilitos en este nuevo año.
¡Empieza el año con el modo detox activado!
1. Infusiones caseras
Las infusiones caseras de hierbas naturales son la mejor alternativa para eliminar toxinas, depurar el organismo y, además, te ayudarán a mantener el cuerpo hidratado.
Gracias al poder depurativo de las hierbas naturales, tu cuerpo recuperará la forma y eliminará los excesos de grasa acumulados durante estos días festivos en los que le hemos dado un capricho a nuestro paladar con deliciosos menús y dulces.
Lo mejor que puedes hacer es tomar agua tibia con limón en ayunas y beber dos infusiones después de la comida y la cena, por ejemplo.
¡Descubre qué infusiones caseras te ayudan a depurar el organismo!
2. Superalimentos que te ayudarán
En el mercado hay alimentos que pueden ayudarte con tu objetivo de adelgazar de forma natural.
Por lo general, las frutas, las verduras, las carnes y los pescados son alimentos reales y todos ellos deben figurar en tu dieta para el buen funcionamiento del organismo.
Sí que es cierto que existen diferentes alimentos que contienen menos calorías y un buen aporte vitamínico que puedes incorporar a tu dieta para saciarte sin necesidad de comer azúcares y ultraprocesados.
La papaya es uno de esos ejemplos de superalimento, ya que destaca por su bajo aporte calórico y su alto contenido en agua y fibra.
La judía es otro de los alimentos que no pueden faltar en la dieta de adelgazamiento porque le proporciona a nuestro organismo proteína, fibra, magnesio y minerales ideales para adelgazar de forma natural.
Los pescados son una alternativa ideal para comer proteína baja en grasas. Los pescados como el atún, el salmón o la caballa contienen grasas saludables que ayudan a reducir el colesterol y nuestro peso.
¡Apúntalos en tu lista!
3. Cocina al vapor
¿Todavía no conoces todos los beneficios de cocinar al vapor?
Olvida las frituras, no harán más que acumular grasa en tu organismo y a la larga contribuirán a que tu colesterol esté por las nubes.
Empieza a cocinar al vapor y notarás como, de forma saciante, puedes comer saludable y sin aportar ningún tipo de grasa a tu cuerpo.
Gracias a la técnica, los alimentos conservarán mejor los nutrientes cocinados al vapor, antes que friéndolos o cocinándolos mediante ebullición, a la plancha o al horno.
Además, los alimentos quedarán muy tiernos y agradables al gusto, ¡y hay cientos de recetas que puedes elaborar fácilmente en tu cocina!
¡Apunta este truco, será de los que marcarán la diferencia en la balanza, sin ninguna duda!
4. Zumos detox
Los zumos a base de frutas, verduras y semillas son una alternativa ideal para consumir frutas y verduras de una manera distinta, deliciosa y práctica.
Si tienes una licuadora, ¡te vendrá genial para elaborar tus propios zumos depuradores en casa!
Deja de lado los refrescos y las bebidas alcohólicas y dale a tu organismo un chute vitamínico que ningún suplemento puede garantizarte.
¡Te dejamos algunas recetas de zumos detox para que puedas elaborar tú mism@!
5. Ingiere alimentos bajos en grasa
Los alimentos bajos en grasa te ayudarán a reducir unas tallas y a sentirte mejor contigo mismo.
Procura alimentarte de carnes como el pollo, el pavo, el conejo y el cordero e ingiere menos carne de cerdo, que suele ser más grasa.
Sustituye la mantequilla por el aceite y controla el consumo de sal.
Deja de lado los alimentos ultra procesados, la bollería industrial y las salsas calóricas y empieza a ingerir comida fresca y real.
¡Tu organismo lo agradecerá, te sentirás más motivado y alegre y conseguirás llegar a tu objetivo!
6. Sigue una dieta natural
Seguir una dieta natural sin suplementos y sin productos que ofrecen milagros sí es posible, ¡y es mucho más fácil de lo que piensas!
Los productos que venden a bombo y platillo algunas marcas tienen en sí mismos poca garantía de que el efecto rebote no aparezca.
La forma más sencilla de adelgazar es comer alimentos reales, frescos y procesados (que no ultraprocesados).
No te fíes de los centros de estética que prometen dietas milagro gracias a sus productos o suplementos, los mejores suplementos son las vitaminas que la comida real te puede aportar, siempre y cuando no haya sido tu médico de cabecera quien te lo haya recomendado por preescripción.
Por norma, tendemos a pensar que nuestro cuerpo necesita un chute de vitaminas para afrontar el cansancio, los resfriados o las gripes, pero... ¿qué vitamina más natural que la que nos proporciona nuestra madre tierra puede existir mejor que esta?
¡Adelgazar es sencillo, y barato, no gastes esfuerzos en suplementos, mejor compra fruta y verdura!
7. ¡Come!
Una dieta en la que se pasa hambre, no se le puede considerar una dieta. El cuerpo, como los vehículos, necesitan gasolina, o, en este caso, alimentos y nutrientes para funcionar correctamente.
Existe una falsa leyenda de que saltándose comidas se adelgaza, pero eso es un sacrilegio para nuestro organismo, ya que lo único que conseguiremos será maltratarlo, deshidratarlo y desatender sus necesidades.
Lo importante es comer, comer bien, es decir, productos reales, buenos procesados y evitar, a toda costa, los ultraprocesados.
Solo así, y con ejercicio moderado, conseguirás lograr tu objetivo de adelgazar de forma sana y natural.
¡No te creas a quien diga que sin comer adelgazarás!
8. Descansa y recupera energías
Después del ajetreo navideño toca descansar y darse un respiro. Descansar es tan importante y vital para nuestro cuerpo como lo es comer.
Habitúate a dormir entre 7 y 8 horas para que tu cuerpo descanse y recupere energía para afrontar una nueva jornada.
Mientras duermes, no estás picando entre horas, ¡ni mucho menos estás pensando en comer!
Descansa y duerme el tiempo suficiente, de esta manera evitarás la aparición de diferentes enfermedades y alargarás, así, tu vida.
No dormir el tiempo necesario produce riesgo de padecer obesidad y de verse alterado el control de la glucosa en la sangre.
9. Establece un objetivo y mantente motivad@
Tan importante es descansar, comer bien y hacer ejercicio como estar motivado frente a un objetivo que nos hemos marcado.
La primera norma para que el objetivo de adelgazar de forma natural se cumpla, es que el objetivo sea real y alcanzable.
Nadie mejor que tú conoce tus capacidades, tus características y tu forma y estilo de vida para establecer una meta que se pueda cumplir.
Proponte un objetivo que sabes que vas a poder alcanzar, pero no quieras abarcar de más, solo conseguirás ofuscarte, desmotivarte y aparcar el objetivo a cumplir.
Una vez hayas escogido el objetivo real, márcate un calendario y síguelo firmemente, aunque debes tener en cuenta que siempre surgen situaciones adversas que van a modificar nuestra rutina, pero intenta seguirlo por y para tu bienestar.
Date un capricho una vez a la semana, una comida con amigos, con familiares o tu pareja ¡y disfruta de esa comida!
10. Activa tu cuerpo haciendo ejercicio moderado
Es el mayor secreto: entrenar, entrenar y entrenar.
Haz ejercicio físico, al menos, dos o tres veces por semana, el que sea, el que más te guste practicar.
El deporte es esfuerzo, pero también es superación y disfrute.
Busca un deporte o una actividad que te motive, que te ayude a superarte y te haga feliz, ¡así será más fácil cumplir con este truco!
Establece rutinas de ejercicio y dedícate tiempo, ¡tan solo serán 3 horas a la semana, seguro que puedes sacar tiempo para invertir en tu bienestar!
¡Tú puedes, y recuerda, si no cuesta, no merece la pena!