Con mucho sobrepeso, ovarios poliquísticos y muchos años intentando quedarse embarazada sin conseguirlo, Beata Bienias tenía todas las papeletas para no ver cumplido su sueño de ser madre. Sin embargo, el pasado 13 de diciembre, esta británica de 36 años dio a luz, por cesárea, nada menos que a tres bebés en el Royal United Hospital de Bath.
Su embarazo ha sido una verdadera sorpresa porque Beata se quedó embarazada por fecundación «in vitro» de una de las niñas, Amelia, en la misma semana en la que había concebido de forma natural a los mellizos Matilda y Borys. Se trata de un rarísimo fenómeno, que se conoce como superfetación, del que sólo se tiene conocimiento de 15 casos en todo el mundo.
Este singular caso también ha sorprendido porque los embarazos múltiples siempre entrañan más peligros, como prematuridad, alteraciones cromosómicas, órganos afectados o déficit de nutrientes. Sin embargo, en esta ocasión, la gestación transcurrió sin ningún problema ni peligro para los bebés ni la madre.
«Fue todo fantástico, muy fluido, no tuve ningún problema y lo disfruté muchísimo», ha explicado a un diario inglés Beata, feliz por haberse convertido, de golpe, en familia numerosa.