- Ingredientes
- 4 trozos de lomo de bacalao desalados
- 2 patatas
- 8 pimientos del piquillo en conserva
- 3 dientes de ajo
- 4 cucharaditas de azúcar
- mantequilla
- leche
- nuez moscada
- aceite de oliva
- sal
- pimienta
Tiempo Total50 minutos
Preparación15 minutos
Cocción35 minutos
Coste € € €
Dificultad
Segundo plato Tipo de plato
No apta para veganos Intolerancia
4 Porciones
Pasos
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01.
Para preparar el bacalao con pimientos, primero lava las patatas y, sin pelarlas, cuécelas en agua hirviendo con sal durante 35 minutos o hasta que estén tiernas. Escúrrelas, refréscalas un poco bajo el agua del grifo y pélalas.
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02.
Trocea las patatas aún calientes, añade 2 cucharadas de mantequilla, una pizca de nuez moscada, sal y pimienta, y tritúralas con el pasapurés. Agrega un poquito de leche, poco a poco, hasta lograr un puré denso pero cremoso.
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03.
Pela los ajos, córtalos en láminas y dóralas en una sartén amplia con aceite, a fuego medio. Incorpora los pimientos bien escurridos, sin amontonarlos, espolvorea la mitad del azúcar y dales la vuelta. Esparce el azúcar restante por encima, deja que se caramelice ligeramente y vierte un poquito de agua, que apenas cubra los pimientos.
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04.
Sube el fuego y deja confitar durante 4-5 minutos, o hasta que el jugo esté caramelizado. Mientras, dora el bacalao en una sartén antiadherente con un poco de aceite.
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05.
Para servir, reparte el puré en los platos con la ayuda de un aro, coloca encima el pescado y los pimientos, y salsea con su jugo de cocción.
El truco de Pronto
Siempre y cuando esté al punto óptimo de sal para que la sed no te despierte en mitad de la noche, el bacalao te ayudará a dormir a pierna suelta. Incluir este tan ligero como digestivo pescado blanco en la cena contribuye a alejar las preocupaciones que ronden por tu cabeza antes de meterte en la cama. Todo se debe a la presencia de ácido glutánico, un compuesto que favorece la producción de un neurotransmisor denominado GABA, capaz de disminuir la actividad nerviosa en el cerebro y proporcionar una agradable sensación de calma y serenidad. Relajar la mente es el primer paso para garantizar un descanso nocturno más profundo y reparador.
