Alberto y Charlene, a su llegada al Baile de la Cruz Roja 2018.
El pasado 27 de julio se celebró en Mónaco el gran evento veraniego del principado, el Baile de la Cruz Roja, donde Alberto II apareció muy sonriente y demostrando haber superado los problemillas de salud que obligaron a su gabinete de comunicación a anunciar que, durante el mes de julio, el sobreano iba a reducir su agenda por encontrarse muy fatigado.
Tras descansar unos cuantos días en familia en su residencia veraniega de roc Agel, Alberto de Mónaco reapareció en la citada gala de la mano de su esposa, Charlene, quien acaparó todos los «flashes» con su sofisticado estilismo.
La exnadadora sudafricana acudió al evento con un espectacular modelo de Versace cuya pedrería recordaba las escamas de una sirena y dejó boquiabiertos a propios y extraños.
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