Jaime Peñafiel habla de Harry y Meghan, el dilema de casarse con quien uno quiere

Los Sussex están siendo los últimos en sufrir la presión derivada de sus orígenes… pero no son, ni de lejos, los primeros. “Las princesas y los príncipes ya no aceptan casarse con quien deben, sino con quien quieren, aunque ellos conlleve escándalos como el vinculado estos días a Harry de Inglaterra y Meghan Markle”, asegura Jaime Peñafiel.

“Sencillamente ya no estamos en la Edad Media y pienso que no hay corona que merezca el inhumano sacrificio de una boda concertada”. Tal y como recuerda nuestro colaborador, ha habido “romances entre ‘royals’ y plebeyos dignos de un guión de película.

Empezando, ya que hablamos de cine, por el príncipe Rainiero de Mónaco y Grace Kelly, una estrella de Hollywood”. Su boda fue boicoteada por las endogámicas casas reales europeas de los años 50. “Grace murió sin entender que se la despreciase por no tener sangre azul”.

Otro clásico es la historia de la cubana María Teresa Mestre y el príncipe Enrique de Luxemburgo. “En su caso, los enemigos de la ‘princesa plebeya¡ estaban en casa: su suegra, la gran duquesa Josefina; y la abuela de su marido, Carlota, quienes la llamaban despectivamente ‘la criolla’”.

Harald y Sonia tuvieron que superar la férrea oposición del rey Olav para darse el “sí, quiero”. Cuando el soberano supo que su futura nuera era hija de una modista gritó: “¡Jamás, jamás, una costurera será reina de Noruega!”.

Marta Luisa, la princesa de este mismo país que, además, “habla con los ángeles, primero contrajo matrimonio con el escritorzuelo Ari Behn, recientemente fallecido, y ahora está liada con un chamán”.