Hablamos con Ágatha Ruiz de la Prada: "Mi nieta es como una Claudia Schiffer en bebé"
Ágatha Ruiz de la Prada, plena de energía y creatividad, nos habla de su segunda parte de memorias, su vida como abuela y su relación con el amor
Agatha Ruiz de la Prada.
En 'Todo por un plan' (editorial 'La esfera de los libros'), la segunda parte de sus memorias, Ágatha Ruiz de la Prada habla de una vida llena de experiencias, del amor, del rencor, de su faceta como madre y abuela y de esos momentos que han marcado su existencia.
La diseñadora abre su corazón en profundidad en nuestra revista y nos hace partícipes de sus alegrías y sus penas.
"Yo hago lo que me da la gana"
Ágatha con su libro.
PRONTO.: ¿Qué diferencia a este libro del anterior?
AGATHA.: Que es mucho más alegre. El otro fue muy dramático. La gente se quedó con el corazón encogido, y ahora me dicen que gusta más este. Ayuda a tomarse las cosas con humor.
P.: ¿Es un anti depresivo?
A.: Esa es la palabra exacta. Es una llamada a vivir con alegría, hacer planes, salir, afrontar tal el presente y el futuro con optimismo… Si te sientes mal, quedarse encerrado en casa es un gran error. Yo hago lo que me da la gana y me lo paso de puta madre.
P.: ¿Has sufrido alguna grave crisis de ansiedad?
A.: No me he deprimido jamás. Ni en mis peores momentos llegué a tocar fondo. Porque siempre estoy haciendo algo que me estimula. Mira, desde que regresé de las vacaciones de verano, he hecho veinticinco viajes… Es que no paro.
P.: ¿Nunca te afectó el desamor, las rupturas sentimentales?
A.: No hasta el punto de hundirme. Bueno, al separarme del padre de mis hijos adelgacé dieciocho kilos en un mes, pero me puse las pilas y salí adelante. O me tomaba las cosas por las buenas o por la malas, y yo opté por el primer camino. Fue una situación muy dura pero entendí que era un cambio de vida, y todo fue a mejor.
"Siempre he sido anti matrimonio"
Ágatha, con José Manuel Díaz-Patón, su actual pareja, con la que asegura ser muy feliz.
P.: Ahora te veo muy feliz al lado de José Manuel Díaz-Patón…
A.: Feliz, serena y muy bien. Pero el centro de mi vida no es el amor, hay otras cosas como el trabajo, los planes, la familia… Hoy me pillas un poco fastidiada, estoy coja por culpa de una fascitis plantar.
P.: ¿Volverías a casarte?
A.: En principio, no. Las relaciones sentimentales son muy bonitas, estás muy bien, pero te casas y empiezan a surgir los problemas. Si ahora me separo, cada uno por su lado y sin mal rollo. De la otra manera es un sufrimiento innecesario. Voy a serte sincera: siempre he sido anti matrimonio.
P.: Pero te casaste con Pedro J.
A.: Lo hice con la boquita pequeña y mira lo mal que salió. Yo le sigo llamando “el innombrable”, esto es para toda la vida. Es que me queda dentro bastante rencor…
P.: Con tus otras parejas rotas te llevas muy bien.
A.: Quedó una amistad. Fueron separaciones amistosas, no como la del “innombrable”.
Pedro J Ramírez y Agatha Ruiz de la Prada.
P.: El apoyo de tus dos hijos es primordial en tu vida.
A.: Siempre se portan muy bien conmigo, son fantásticos. Estamos muy unidos.
P. ¿Cómo es la Agatha abuela?
A.: Tengo una nieta a la que no veo tanto como quisiera. Pero cuando estamos juntas soy una abuela feliz, es una niña tan simpática y tan buena… A sus siete meses de edad es como Claudia Schiffer en bebé.
P.: ¿Eres buena suegra?
A.: Fenomenal, porque no me entrometo en nada.
P.: Y tu hija se desvive por su sobrina.
A.: Está enloquecida con la niña. A ver si ella se anima y se queda embarazada… pero acaba de pelearse con su pareja.
P.: ¿De qué presume la Ágatha más íntima?
A.: De ser bastante transparente, no cambia la imagen pública de la personal, mi vida está llena de colores.
P.: ¿La religión te acompaña?
A.: La verdad es que me encanta la religión, aunque soy menos practicante de lo que debería. Siento mucho temor de Dios, y por eso me porto muy bien.
P.: ¿Tu novio como lleva el que hagas tantos viajes?
A.: Soy un chollo de novia porque no le agobio.
P.: ¿Llegará el día en que te reconcilies con Carmen Lomana?
A.: Ésa no es una prioridad para ninguna de las dos.
P.: ¿Quien te la hace la paga?
A.: Intento olvidar las cosas malas.
