Muere el Papa Benedicto XVI a los 95 años tras una larga enfermedad

El Papa emérito, Benedicto XVI, ha fallecido a primera hora de la mañana en el monasterio de la Ciudad del Vaticano donde residía desde su renuncia al Papado en febrero de 2013. Se trata de una trágica noticia que se esperaba después de que el Papa Francisco pidiera que orasen por la salud de Joseph Ratzinger unos días antes.

"Quisiera pedirles a todos una oración especial, por el Papa emérito Benedicto, que en silencio está sosteniendo a la Iglesia. Recordarlo – está muy enfermo – pidiendo al Señor que lo consuele, y lo sostenga en este testimonio de amor a la Iglesia, hasta el final" pidió Francisco al final de su audiencia general de cada miércoles. Finalmente, ha sido este sábado, 31 de diciembre, cuando ha fallecido a los 95 años de edad.

Matteo Bruni, el portavoz de la Santa Sede, confirmó que en las últimas horas había tenido un "agravamiento debido a su avanzada edad", señalando que la situación estaba bajo control y que seguía siendo observado atentamente por sus médicos.

Benedicto XVI: un Papa revolucionario

Joseph Ratzinger fue el 265º Papa de la Iglesia católica desde el 19 de abril de 2005 hasta su renuncia voluntaria del 11 de febrero del 2013. Este gesto dejó perplejo al mundo, dado que no se había visto un caso así en seis siglos y su decisión, muy meditada, rompía el principio del papado vitalicio.

Aunque hubo reacciones muy distintas, muchas personas definieron su gesto como un acto revolucionario y de valentía por el que liberó a la institución de esa fase marcada por el declive de su salud. Desde entonces, se trasladó al monasterio de la Ciudad del Vaticano, donde ha residido hasta el día de su fallecimiento.

Benedicto XVI: así será su funeral

Poco después de salir a la luz la noticia, el responsable de comunicación del Vaticano ha anunciado que el próximo lunes, 2 de enero, se celebrará la capilla ardiente de Benedicto XVI en la basílica de San Pedro.

Es la primera vez en la historia que fallece un Papa que renunció a su cargo, por lo que las ceremonias que tendrán lugar estos días marcarán un precedente histórico de cara al futuro ante la posibilidad de se siga su ejemplo. Al no existir un protocolo ante un caso así, se baraja que se siga con los mismos rituales que corresponderían a un Papa en activo, excepto la parte de la elección de un nuevo pontífice.

Por ahora, se ha podido conocer que el Papa Francisco será el encargado de oficiar el funeral que se celebrará el próximo 5 de enero a las 9:30 horas de la mañana en la Plaza de San Pedro.