A punto de que se cumplan los seis años de la muerte del cámara italiano Mario Biondo, la muerte del marido de Raquel Sánchez Silva sigue siendo un asunto con demasiados interrogantes.
En España, el suceso se cerró oficialmente como un suicidio, pero la familia del fallecido se negó siempre a aceptar esa versión de los hechos y siguieron luchando hasta lograr que el caso se reabriera en su país, donde numerosos criminólogos suscriben la hipótesis de un asesinato.
Ahora, la presentadora ha tenido que viajar a Italia y declarar en un juzgado, donde se ha revelado un dato tan interesante como inesperado.
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