Sandra Sabatés, la compañera de Wyoming, se estrena como escritora

Antes de dormir, a casi todos nos contaban cuentos clásicos cuyas protagonistas eran mujeres frágiles a las que había que rescatar, princesas que esperaban que llegara su príncipe azul para ser felices. "En eso hemos cambiado, ya somos mujeres mucho más empoderadas, pero hay algo que no ha cambiado respecto a esos cuentos, y es la violencia que sufren sus protagonistas, que es exactamente la misma que sufren las mujeres a día de hoy", remarca Sandra Sabatés.

La copresentadora de El intermedio, junto a Wyoming, acaba de publicar "No me cuentes cuentos" (Ed. Planeta), un libro en el que las protagonistas son mujeres reales que han sido agredidas, violadas o mutiladas. "Mi idea es concienciar, decir: 'Esto está pasando en nuestro país, que no nos cuenten cuentos diciendo que la violencia de género no existe o es una invención ideológica. Somos víctimas de violaciones múltiples, de violaciones por sumisión química, de mutilaciones genitales femeninas, de abusos sexuales infantiles, de violencia física y psicológica. Es brutal la violencia que se ejerce aún hoy contra la mujer por el hecho de ser mujer'", cuenta.

"Cambiar las mentes para avanzar hacia la igualdad real"

PRONTO: Aunque todavía exista mucho machismo en la sociedad, en "El Intermedio" tienes un gran altavoz de denuncia.

SANDRA SABATÉS: Yo estoy feliz de que el feminismo sea uno de los grandes valores de "El Intermedio". La sección "Mujer tenía que ser" surgió porque vimos que debían ser las propias mujeres las que contaran su experiencia para evidenciar que sigue habiendo muchas desigualdades. Los mensajes de la extrema derecha calan a base de repetir. Contra esto, ¿qué hacer? Contrarrestar los mensajes aportando datos verdaderos y con la educación. Sólo así podemos cambiar las mentes para avanzar hacia la igualdad real.

Sandra Sabatés firmando ejemplares de su libro el Día de Sant Jordi:

"Tenemos que hablar de machismo y de sexo con nuestros hijos"

P.: Hablando de educación, ¿tú has sentado a tu hijo y le has hablado de tu libro?

S. S.: Sí. Y va dedicado a él. Es importante que, como padres, en los colegios y en la sociedad se empiece a concienciar a los más pequeños. Mi hijo tiene 11 años y le conté qué es lo que estaba intentando hacer, que veía que en los cuentos de toda la vida se esconde una violencia contra las mujeres que hay que visibilizar, porque no nos ayuda a avanzar. Yo le hablo mucho a Koldo de cómo hemos sido hasta ahora y de cómo no debemos ser. Y le hablo mucho del consentimiento, de que no puede besar a una chica si las dos partes no quieren. Hay que hablar de sexo, porque hablamos poco de sexo con nuestros hijos y luego no puede ser que la base de su formación sexual sean los vídeos porno donde se enseña a utilizar el cuerpo femenino pensando en el propio placer masculino, cosificando a la mujer. Hay que hablar más con nuestros hijos.