Hugo Arévalo: así es el hombre que quiere enamorar a Tamara Falcó
Destacado hombre de negocios y muy religioso, Hugo ya ha sido invitado por la marquesa de Griñón a pasar la Nochevieja con ella
Tamara ha explicado que ha tenido varias citas con Hugo, al que conoce desde hace 15 años.
Son amigos desde hace 15 años, pero ha sido ahora cuando Hugo Arévalo ha decidido declarar su amor a Tamara Falcó, justo cuando no hace ni tres meses que rompió su compromiso con Íñigo Onieva, algo que ha molestado sobremanera al ex de la hija de Isabel Preysler.
Tanto es así que el empresario no ha dudado en arremeter contra el que fuera su amigo y que ahora podría tratarse de la nueva ilusión de la marquesa.
Íñigo Onieva insulta al amigo especial de Tamara
Según 'El programa de Ana Rosa', el exprometido de Tamara Falcó no dudó en estallar contra su ahora examigo cuando se enteró de su declaración de amor. "Eres una sucia rata. Declararse a la ex de un amigo es algo que de por sí está prohibido dentro del código de hombres. No es que solamente no seas hombre, sino que eres una mier** de ser. Espero que vayas más allá de tus propios intereses y tu ambicionada escalada social", le escribía Íñigo en su grupo de WhatsApp, 'Tocotó'.
Íñigo se enfadó mucho cuando se enteró de la "traición" Hugo Arévalo.
Y mientras Hugo no dice nada, Tamara sí confirma su ilusión por este joven empresario, al que considera un hombre 10. Y es que el examigo de Íñigo es un destacado hombre de negocios, donde ha conseguido triunfar al involucrarse en diferentes 'start ups' de éxito, como Tuenti, Glovo o Jobandtalent, entre otras.
Además, es muy religioso, ejerce diferentes voluntariados, deportista y le encanta jugar al ajedrez. Su familia y amigos destacan de él su afán de superación, su emoción al enfrentarse a nuevos retos y que es un gran negociador.
"Cuando era pequeño, si no sacaba sobresalientes se enfadaba muchísimo", explica Carmen, su madre, a la que está muy unido. "Mis padres cuentan como si fuera algo especial que a los 6 años me levantaba a las 5 de la mañana, me duchaba y me ponía a estudiar", relata Hugo.
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