Jorge González: “Cuando crees que todo está perdido, siempre hay una luz”
El cantante asegura que ganar ‘Tu cara me suena 8’ ha sido un auténtico sueño para él
Una enorme inyección de energía y optimismo. Esto es lo que ha supuesto para Jorge González ganar la octava edición de ‘Tu cara me suena’ en una de las ediciones más complicadas, tanto por el confinamiento como por el temporal Filomena. Pero este madrileño logró imponerse en una final de infarto y sueña con seguir dedicándose a la música, tras una época en la que daba esta faceta por perdida.
Y es que tal y como confesó Jorge, antes de participar en este concurso “me plantee retirarme de la música”. Afortunadamente no lo hizo y el público y sus millares de seguidores están encantados con ello.
“Fui muy versátil y cambié mi voz para hacer de otros personajes”
PRONTO: ¿Sigues en “shock” o ya has asumido que eres el ganador? Porque tú te lo has currado mucho, pero jamás tuviste la certeza de que podrías ganar.
JORGE GONZÁLEZ: Puse de mí todo y más, incluso lo que pensaba que no podría sacar adelante, lo hice. Fui una diva como Beyoncé, fui un señor mayor con la voz rasgada cantando un himno como “Dirty Dancing”, canté funky, flamenco, copla, salsa... ¡Lo canté todo! E incluso en italiano e inglés. ¿Había algo más que yo pudiese hacer? Creo que no. Y eso creo que fue lo que el público, al final, valoró. Me han votado porque fui muy versátil y cambié mi voz para hacer de otros personajes. Eso creo que es lo que han premiado.
Este vídeo repasa su paso por ‘Tu cara me suena’:
“Me volvía loco con los cambios de idioma”
P.: Jorge, ¿qué ha sido lo más duro de la edición? Porque como decías te has atrevido con todo y has cantado hasta en inglés e italiano sin tener ni idea, de oído.
J.G.: Me volvía loco con los cambios de idioma. No sabes cómo estudiaba durante toda la semana. No hablo inglés y mucho menos italiano. Lo que hacía era escuchar lo que decía, lo escribía tal y como lo oía y, luego, lo memorizaba. ¡De locos!
P.: Siempre te has esforzado muchísimo. Tanto, que las valoraciones con nota baja te han sentado un poco mal, te defraudaron, como el día de Beyoncé.
J.G.: No me enfadé, pero sí me sentí decepcionado, porque yo creo que como resultado final estuve bien. Se me decía que no había cantado mucho, pero es que Beyoncé en esa actuación no canta. Yo hice lo que hacía Beyoncé, mejor o peor, pero no se me puede juzgar con algo que ella no hace. Yo no puedo cantar más si ella no lo canta. Además, en la vida me había puesto unas uñas, unas pelucas, unas pestañas ni me he movido como una mujer. Y me vi y creí que ahí había un trabajo que no se me había valorado, y a otros compañeros sí les valoraban el esfuerzo que hacían por parecerse a los artistas.
Aquí puedes ver la actuación:
“Lo veía todo muy difícil y las facturas no se pagan solas”
P.: ¿Cómo ha sido para ti este año? Porque, a nivel personal, has pasado cosas duras.
J.G.: Sí. Pues imagínate, en pleno confinamiento, de repente me quedé sin voz. Pensé que era de los nervios y por eso estaba ronco de no poder casi apenas hablar. Pasado un mes, me asusté. Pero, por la pandemia, no podía ir al médico y estuve con la incertidumbre cuatro meses. Hasta que, por fin, pude ir a un otorrino y me dijeron que me había roto prácticamente el lado de una cuerda vocal y que había que operar.
P.: Sentirías terror por saber si ibas a recuperar tu voz o no.
J.G.: Exacto. Y me operaron justo un mes antes de volver. Tú no sabes lo que lloré. Le preguntaba al médico: “¿Podré volver a cantar?”, y el hombre se reía. Me decía: “Que sí, tranquilo, tú confía en mí”. Imagínate con qué miedo regresé a ‘Tu cara me suena’. No sabía si las cuerdas me responderían, si me las volvería a romper... Contarlo es fácil, pero ha sido muy duro.
P.: Además, el programa significaba mucho para ti. Nos has confesado que, meses antes de presentarte, te planteaste retirarte de la música.
J.G.: Mi entorno lo sabe. Antes de entrar en “Tu cara me suena” pensaba: “Venga, ya está, habrá que ir a buscarse una alternativa, un curro”. Lo veía todo muy difícil y las facturas no se pagan solas.
P.: ¿Estabas incluso dispuesto a volver a la venta ambulante o a lo que fuese?
J.G.: No a ello, pero sí a buscar trabajo. Estaba en la fase de ver qué podía hacer. Y, de repente, se me ocurrió volver a escribir a Ismael Agudo, que es quien lleva los “castings” del programa. Le dije que me gustaría probar. Justo cuando ya pensaba en el retiro porque no tenía para pagar las facturas, me llamó. Incluso dudé si ir o no porque pensaba que, si no me cogían, la desilusión me iba a hundir psicológicamente. Pero fui con toda la ilusión del mundo y, al final, me dieron incluso la enhorabuena, me dijeron que hice un “casting” brutal. Imagínate, cuando crees que todo está perdido, siempre hay una luz.
“Mi victoria en el programa es un premio para toda la familia”
P.: Ahora, ¿qué puertas crees que se te van a abrir en el terreno musical? ¿Qué planes de futuro tienes?
J.G.: No lo sé, lo que sé es que, para mí, psicológicamente ganar ha sido un chute, porque yo estaba agotado. Que la mayoría de los votos de los españoles fuesen para mí significa que me quieren, que les gusto, que quieren algo mío. Esto me ha dado la energía de seguir luchando por mi música. Ahora mismo estoy trabajando en un “single” que sale a finales de mes y es un dúo con el rapero Moncho Chavea.
P.: A tus hijos les dedicaste tu triunfo. ¿Qué te dicen?
J.G.: ¡Bueno, imagínate! Los tengo deseando verme. Lloraban y gritaban: “¡Mi papi ganador, mi papi ganador!”. Es que es un sueño. Y es devolverle a mi familia todo el tiempo que han invertido en mí en acompañarme a los “castings”. Es un premio de todos.