La tonadillera se sinceró con Jordi González.
Isabel Pantoja volvió a ser la protagonista en el plató de Telecinco durante el debate presentado por Jordi González el pasado domingo. La tonadillera no se cortó un pelo y dijo todo lo que pensaba de su estancia en el concurso y así zanjó algunas cuestiones que se quedaron pendientes en la pasada Gala 12.
La cantante explicó que, tras su entrevista con Jorge Javier Vázquez, en la que vio a sus hijos, viajó hasta Cantora para reencontrarse con su madre y que para ella fue muy importante. «Cuando me fui a la isla dejé a mi madre muy malita, y cuando la he visto me ha reconocido. Para ella yo estaba cantando en América. Entonces me dijo, mi Maribel, mi Maribel, mi Maribel... Y yo con eso ya he ganado», contó emocionada Isabel.
Además, ha comentado que, después de su estancia en la isla, es incapaz de comer con normalidad. “Tengo que hacer cinco comidas y hago dos”, ha explicado al presentador. Este se suma a la lista de motivos por los que la tonadillera “no volvería a repetir la experiencia” de «Supervivientes».
Su enemistad con Mónica Hoyos
El programa le ofreció a Isabel Pantoja despedirse de Mónica Hoyos, pero ella se negó. La cantante se enteró hace poco que la ex de Carlos Lozano la calificó como «hija de puta», por lo que no le dedicó las mejores palabras: «Yo a esa señora la he conocido en la isla, la isla ha terminado. Usted se va a venir en un avión como he hecho yo, y a la calle».
Después, añadió que «me despedí de ella en la isla. Yo la abracé con mucho cariño a pesar de que en su momento me llamó lo que me llamó. De eso me enteré ayer, por eso no la quiero ni ver. Yo sería incapaz de mencionar a su madre. Una madre es lo más sagrado que tenemos todos. A mi madre esa no le dice eso, porque a mí no me da la gana».