Las parejas de Alejandro Sanz, de Jaydy Michel a Rachel Valdés
El nuevo episodio en la vida amorosa de Alejandro Sanz comenzó el verano de 2019, cuando el cantante confirmó lo que ya era un secreto a voces: estaba nuevamente enamorado.
La afortunada es la cubana Rachel Valdés, una artista de estilo vanguardista conocida por la creación de instalaciones de gran tamaño, como la que hace unos meses pudo verse en la emblemática plaza Times Square de Nueva York.
La relación con Rachel parece que va “viento en popa”. Tanto es así, que ya se escuchan rumores de boda y de ampliar la familia. En los próximos meses veremos el ritmo que lleva la pareja en esta relación.
¿Quién es Rachel Valdés?
Rachel y Alejandro están unidos por el arte. Mientras el madrileño se dedica desde hace 30 años a la música, componiendo y cantando sus propios temas, la cubana crea obras artísticas caracterizadas por su estilo vanguardista y enormes dimensiones.
Rachel Valdés es la pareja de Alejandro Sanz desde julio de 2019.
La artista, según explica en su web, crea escenarios en diferentes entornos y espacios para ayudar al espectador a percibir la realidad de una manera diferente y, para ello, se inspira en la naturaleza.
Ruptura de Alejandro Sanz y Raquel Perera
Solo unas semanas antes de confirmar el inicio de la actual relación amorosa de Alejandro, el artista hizo pública su separación con Raquel Perera, lo que corroboraba lo que hacía tiempo que estaba en boca de todos, las serias dificultades que atravesaba el matrimonio.
En aquel momento, julio de 2019, el cantante compartió en sus redes sociales el fin de la relación con la madre de dos de sus hijos, Dylan y Alma. Con estas palabras dejaba claro que a pesar de que ya no serían marido y mujer, el cariño entre ambos permanecería. “Somos una familia y siempre lo seremos. Decidimos amarnos para siempre y así será. Lo eterno tiene la complejidad y la ventaja de transformar las maneras de amarse en otras direcciones, sin destruir el cariño, la lealtad y la responsabilidad conjunta sobre nuestros hijos. Nuestra familia está por encima de cualquier cosa… Gracias por respetarlo”.
Estas sinceras palabras del cantante ponen en evidencia su extrema sensibilidad, así como la buena sintonía con su exmujer. Todo un ejemplo.
Antes de ser novia y esposa de Alejandro, Raquel Perera fue su asistente personal durante más de una década. Así, la madrileña trabajó mano a mano con el cantante durante más 10 años y, como “el roce hace el cariño”, en 2007, la relación entre ambos pasó de profesional a personal.
Alejandro Sanz y Raquel Perera paseando por Madrid.
La pareja mantuvo su relación con discreción, apartados de los focos hasta que en 2011 anunciaron que esperaban su primer hijo en común, Dylan, que nació el 12 de julio de ese mismo año.
La boda de Alejandro y Raquel
El 26 de mayo de 2012, Alejandro y Raquel celebraron el bautizo de su hijo Dylan en la finca que el cantante tiene en Jarandilla de la Vera, en Cáceres (Extremadura). La pareja vivió un día muy especial en el que reunieron a sus amigos más cercanos y queridos. Ahora bien, lo que los invitados no sabían es que el bautizo iba acompañado de una enorme y bonita sorpresa: la boda de los padres del pequeño.
Alejandro y Raquel se casaron el 23 de mayo de 2012.
Algunos de los artistas y amigos que acudieron a la celebración fueron el padrino del niño, Paco de Lucía o Paulina Rubio, Elena Tablada o Antonio Carmona y su mujer, Mariola Orellana.
Dos años más tarde, la familia volvió a crecer con la llegada, el 24 de julio de 2014, de su hija, Alma.
Jaydy Michel, su primer amor
Cuando Alejandro Sanz comenzó su relación con Raquel Perera, ya hacía dos años que se había separado de la mejicana Jaydy Michel. La relación con la modelo duró siete años, desde 1997 hasta 2004 y, fruto de ese amor nació la primera hija de ambos, Manuela, el 28 de julio de 2001.
Tres años antes, el 30 de abril de 1998, la pareja, que era la viva imagen de la felicidad, contrajo matrimonio en una ceremonia oficiada por un monje hindú en Bali.
Sin embargo, como se suele decir, “no es oro todo lo que reluce” y seis años después, a finales de 2004 llegó la inesperada ruptura de Jaydy y Alejandro, de la que no dieron ninguna explicación.
La relación de Alejandro Sanz y Jaydy Michel duró desde 1997 hasta 2004.
Eso sí, después de dos años de silencio, en 2007, la modelo aseguraba que mientras estuvo casada con Alejandro se enteró de que había tenido un hijo con otra mujer.
No sería de extrañar de esta situación fuera el detonante o al menos, una de las razones de su separación con el cantante.
El hijo secreto de Alejandro sale a la luz
Por su parte, Alejandro Sanz emitió una nota para hacer público un hecho tan sorprendente como delicado. El cantante anunciaba que había tenido un hijo fuera del matrimonio con Jaydy. Un niño llamado Alexander que por aquel entonces tenía 3 años.
¿Por qué Alejandro informó sobre esta paternidad? Según explicaba él mismo en el comunicado, el motivo principal era evitar “el peligro de que aspectos íntimos de mi vida se vean quebrantados con infundadas especulaciones, opto yo mismo por comunicar lo que en realidad nunca he ocultado a mi entorno más cercano y es que soy padre orgulloso de un niño de nombre Alexander de tres años de edad nacido fuera de mi relación por todos conocida”.
Alejandro siempre ha mantenido una buena amistad Valeria Riera, la madre de Alexander, quien ha asegurado en numerosas ocasiones que cuando conoció Alejandro no sabía que estaba casado.
Alexander tiene ahora 16 años y parece que lleva la música y el arte en las venas, ya que su padre desveló el verano pasado que es uno de los integrantes de su banda que le acompaña en los conciertos de La Gira.
También compone y hace rap. Todo un orgullo para Alejandro quien no duda en mostrar en las redes sociales el enorme amor que siente por su hijo.
Prueba de ello son estas palabras de disculpa por no poder asistir a un concierto de Alexander: “El otro día le prometí ir a ver su concierto de jazz, pero le fallé y, con mi maldita cabeza llena de cosas de trabajo, lo olvidé. Un fallo imperdonable por mi parte. Por eso, hijo mío, te quiero pedir perdón delante de todo el mundo. Porque no hay nada que quiera más que tú. Y porque eres un chico bueno, talentoso, inteligente y sensible y no te mereces que yo me olvide de tu concierto... Espero que disculpes a tu desmemoriado padre y que me permitas resarcirte siendo el papá que te mereces. Te amo con locura”.