Rosa López: "Me duele no haber hecho más caso a mi abuela"
La cantante Rosa López se lanza a un nuevo reto en su vida como concursante de 'Maestros de la Costura Celebrity', en La 1
La granadina Rosa López no para y este año lanza perfume.
Ella nunca dice que no a todo aquello que la haga crecer y descubrir a una nueva Rosa López. Y más en este caso, pues tiene la espinita clavada de que pequeña su abuela le quiso enseñar a coser y ella no le hizo caso, ya que estaba siempre metida en su cuarto con su música.
Pero ahora, a sus 44 años -los cumple el 14 de enero-, la granadina Rosa López ha aceptado el reto de ser concursante de 'Maestros de la Costura Celebrity', en La 1, donde la vemos competir con otros famosos de la talla de Laura Sánchez, la Terremoto de Alcorcón, Silvia Superestar, Canco Rodríguez, Eduardo Casanova, Óscar Higares, Mónica Cruz, Pilar Rubio, Carmen Farala, Edu Soto o María Esteve.
En la imagen promocional de 'Maestros de la costura'.
PRONTO: ¿Vas a llevar bien las críticas del programa, si las hay? Porque tú eres sensible.
ROSA LÓPEZ: Si me llega a pillar en otra época igual si me hubiera venido un poquito abajo, porque era más insegura, pero el tema del victimismo hay que dejarlo a un lado porque no vale para nada. Para mí ha sido precioso aprender del jurado, pero también de los compañeros. Yo es que sigo con mis mismos despistes, da igual la edad, soy un desastre, pero voy aprendiendo despacito cosas que me van a servir a lo largo de mi vida.
Rosa López: "Uno de mis sueños era vestir a mi madre"
P.: Si te viera tu abuela estaría orgullosa.
R.L.: Yo es que siempre estaba fantaseando en mi cuarto, pero una de las cosas que me ha martilleado en la cabeza es no haber hecho más caso a mi abuela. Ella me decía: “Vente, hija, que una mocita como tú tiene que saber coser, igual que fregar”. Y lo que me dejaba alucinada es cómo conseguía sacar tela para arreglar un tomate de un calcetín, cómo conseguía llenarlo sin hacer un pliegue, ¡yo no entendía nada! Me da pena no haber aprovechado ese conocimiento que me podía haber llevado, igual que mi madre no me enseñó alemán, pues esto igual. Porque no quise atender. Qué pena no haberme dado cuenta de lo bonito y maravilloso que es este mundo. En fin, echo mucho de menos a mi abuela. Y uno de mis sueños era vestir a mi madre.
P.: ¿Lo has conseguido?
R.L.: No, pero estoy en ello.
P.: Pero estás haciendo algo para ella.
R.L.: Sí, porque ella es una mujer muy elegante y siempre le ha preocupado su cuerpo, con las tallas y la verdad es que vestirla y hacerla feliz sería un regalo.
P.: ¿Pero ya tienes nivel para hacerlo y crear cosas tú sola?
R.L.: Ahora sí, ahora puedo.
P.: Rosa, ¿te atreverías ahora a diseñarte o coserte un vestido de boda?
R.L.: Pues sí, mira, pero molaría que alguien me ayudara porque estaría tan nerviosa, ja, ja, que si lo diseño yo sola puede salir chueco, ja, ja. Pero esto es como la guitarra: yo no sé tocar, pero si me pongo toco canciones. O con el piano. Pero la costura es un mundo. Coso de oído, ja, ja.
Con su novio y mánager, Iñaki García.
P.: ¿Habrá boda este año?
R.L.: ¡Quién sabe! Pero este año creo que no, pero no lo sé porque queda mucho. Pero yo ya me siento casada y tengo hasta hijos perrunos.
P.: De hecho acabas de incorporar uno nuevo a la familia.
R.L.: Sí, ¡ya tengo seis! Seis perros y una paloma. Es que un hombre me dijo que si no me lo quedaba lo iba a ahogar. Es un cachorro, lo he llamado Uva.
P.: Se te viene un año intenso en el que lanzas perfume, estás con el nuevo disco.
R.L.: Sí, y gira y libro. Porque todos en esta vida tenemos una historia que contar y si mi crecimiento personal le vale a alguien, sin ser referente de nadie porque soy un desastre total, ya vale la pena. Yo voy aprendiendo con la gente y programas como éste me hacen volver a redescubrirme y aprender de nuevo. Tenemos una profesión que nos ilusiona, es como casarte todos los días.
