Rocío, de 22 años, con su padre, al que se siente muy unida
Pese a que recientemente saltaron rumores sobre la posible participación de Rocío Flores en un «reallity», parece que mucho tienen que cambiar las cosas para que esto suceda. Y eso que Telecinco le habría hecho una suculenta oferta para participar en la próxima edición de uno de sus programas estrella, «Supervivientes»: nada menos que 15.000 euros semanales.
La primogénita de Rocío Carrasco y Antonio David no quiere exponer públicamente sus sentimientos más íntimos y, en este tema, hace causa común con Andrea Janeiro, la hija de Belén Esteban, y opta por llevar una vida normal en el mayor anonimato posible.
«Por suerte, me parezco a mi padre», ha dicho la joven, de 22 años, que también le ha agradecido «la educación que nos has dado. Gracias a eso no voy a caer tan bajo. Eres mi ejemplo a seguir. Teniéndote a ti me sobra el resto». Rocío adora tanto a su padre, que no ha mostrado reparos en enfrentarse a su madre por él.
Así pues, de momento, Rocío seguirá ayudando a la economía familiar llevando la web y las ventas por Internet de Olé & Amén, la tienda de la esposa de su padre, Olga Moreno. Además, también ejerce de «coach» nutricional, lo que le ha permitido perder unos cuantos kilos en los últimos meses.
La joven, que lleva siete años distanciada de su madre, continuará con su vida lejos del foco mediático y disfrutando de su relación con Manuel, un camarero malagueño con el que sale desde diciembre del 2016.