- Ingredientes
- 500 g de helado de vainilla
- 4 barquillos de chocolate
- 6 cucharadas de almendra granillo cruda
- 1 cucharada de azúcar
- 1 cucharadita de canela en polvo
- 75 g de chocolate fondant
- 40 ml de nata líquida para montar
Tiempo Total45 minutos
Preparación40 minutos
Cocción5 minutos
Coste € € €
Dificultad
Postre Tipo de plato
No apta para veganos Intolerancia
4 Porciones
Pasos
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01.
Trocea el chocolate y ponlo en un bol. Calienta la nata hasta que hierva y viértela sobre el chocolate.
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02.
Mezcla con unas varillas hasta obtener una crema homogénea y brillante y deja enfriar en la nevera 6 horas.
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03.
En una sartén sin condimento, calienta la almendra junto con el azúcar, removiendo hasta que esté dorada.
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04.
Esparce la almendra, sin amontonarla, sobre una fuente forrada con papel de horno y deja que se enfríe.
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05.
Retira el helado de vainilla del congelador y deja reblandecerlo a temperatura ambiente.
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06.
Espolvorea el helado con la canela y remueve rápidamente para integrarla.
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07.
Rellena hasta la mitad 4 vasitos, añade una cucharada de crema de chocolate y rellena con más helado.
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08.
Deja los vasitos 30 minutos en el congelador. Después, inserta un barquillo en el centro de cada helado y congela.
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09.
Antes de servir, sumerge los vasitos unos instantes en agua caliente y reboza los helados con la almendra.
El truco de Pronto
Es uno de los más fáciles y puedes elaborarlo con o sin heladera. Empieza calentando en un cazo 150 ml de nata líquida para montar y 150 ml de leche junto con una vaina de vainilla abierta por la mitad. Aparte, bate en otro recipiente 4 yemas de huevo con 120 g de azúcar. Retira la vainilla y vierte la mezcla de leche y nata sobre las yemas, mientras remueves con unas varillas. Calienta hasta que espese como unas natillas y, fuera del fuego, añade 300 ml de nata líquida para montar y una pizca de sal. Deja enfriar en la nevera y prepara el helado en la heladera. Si no tienes, congela la crema y, aproximadamente, cada hora, retírala del congelador y bátela enérgicamente con unas varillas para eliminar los cristales de hielo que se forman. Repite la operación 3 o 4 veces, hasta conseguir una textura cremosa.