La familia real: las claves de su reconciliación tras años enfadados
Los Reyes y sus antecesores asistieron a la misa conmemorativa por el hermano de la reina Sofía, que se celebró en el Reino Unido, y se mostraron de lo más cordiales entre sí
Juan Carlos y Felipe a la salida del funeral
Fuera de España, rodeados de "royals" y en un evento solemne, pero no oficial, los reyes Felipe y Letizia y sus antecesores, Juan Carlos y Sofía, escenificaron una reconciliación familiar que se venía gestando desde hacía tiempo.
Juan Carlos podría mudarse a Ginebra
El lenguaje corporal de Juan Carlos y su hijo demuestra que la relación entre ellos es más cercana y amable de lo que se decía.
La misa en memoria de Constantino de Grecia, hermano de la Reina emérita, que se celebró en la capilla de San Jorge del Castillo de Windsor (Reino Unido), fue el escenario perfecto para la reaparición de los cuatro juntos y en buena sintonía, como preludio de un posible regreso definitivo a España del emérito que cada vez parece más cercano.
Juan Carlos y Sofía en el funeral.
Y es que según fuentes citadas por el programa ‘Así es la vida’ de Telecinco, aunque la residencia oficial del padre del Rey siga estando en Abu Dabi, él pasa cada vez más tiempo en Ginebra (Suiza), donde podría instalarse temporalmente antes de volver a España.
Allí vive la infanta Cristina –a sólo dos horas y media en avión de Madrid contra las más de seis que hay desde los Emiratos– y fue el lugar elegido por él y por sus hijas para celebrar la Navidad juntos.
La reina Letizia ha cedido por el bien de su familia
La reina, junto a su hermana, Irene, bromea con su sobrino Felipe de Grecia.
Pero volviendo al histórico momento de la reconciliación pública de los Reyes, éste quedó reflejado en la foto de Juan Carlos saliendo del templo apoyado en el brazo de un diligente Felipe VI, ambos seguidos por Sofía y Letizia.
Además, otras instantáneas mostraron a la actual Reina bromeando con su suegro o saludando con un beso a su suegra, dando a entender que, por amor a su marido y a su hija, heredera al trono, ha dejado atrás las rencillas y busca recuperar la paz tras 18 años convulsos para ellos.
Las infantas Elena y Cristina, con el hijo mayor de ésta, Juan, que vive en Londres.
Como recordarán nuestros lectores, en el 2006, salieron a la luz los tejemanejes financieros de Iñaki Urdangarin; en el 2010, Juan Carlos fue operado de un tumor en un pulmón; dos años más tarde, el incidente de Botsuana destapó su romance con Corinna Larsen, quien lo llevó ante la justicia británica; en el 2014, abdicó en favor de su hijo y el 3 de agosto del 2020, se marchó de España por la puerta de atrás para acabar instalándose en Abu Dabi.
Al menos, dos encuentros secretos
Un día después de la misa, la Reina decidió darle un nuevo aire a su melena, que últimamente lucía larguísima, y se rindió al corte del momento: el "clavicut" –corte a la altura de la clavícula– con el que, una vez más, confirma su título de "royal influencer".
El trono se tambaleaba y Felipe y Letizia se vieron obligados a establecer un férreo cortafuegos para proteger y dar estabilidad a una Familia Real que redujeron oficialmente a cuatro miembros: ellos dos y sus hijas, Leonor y Sofía. Fue una decisión dolorosa y difícil para el Rey, que, por el bien de esa familia que personifica la Corona, alejó a su padre.
Las infantas Elena y Cristina están pendientes en todo momento de su padre y son quienes más cariño y ayuda le ofrecen.
Sin embargo, el periodista de investigación de ‘El Debate’ Alejandro Entrambasaguas asegura en su libro ‘Juan Carlos I, el Rey en el desierto’ que ese alejamiento se dio sólo de cara a la galería, porque el exmonarca y su hijo se han reunido en secreto dos veces desde entonces. Otras fuentes hablan de un mínimo de cuatro encuentros.
El primero fue en mayo del 2022, cuando murió Jalifa bin Zayed al Nahyan, presidente de Emiratos, y Felipe viajó hasta allí para participar en el funeral de Estado. El Rey aprovechó para reunirse con su padre y, meses después, Juan Carlos regresó por primera vez a España para participar en una regata en Sanxenxo (Pontevedra).
Este tipo de visitas náuticas se han repetido hasta en cuatro ocasiones, pero además, el anterior monarca ha recalado en Vitoria para una revisión odontológica, y en Madrid, donde, el pasado 31 de octubre, asistió con toda la familia a la fiesta de mayoría de edad de su nieta Leonor y, el 20 de diciembre, al 60º cumpleaños de la infanta Elena.
"Quiere morir en su país"
La infanta Cristina con su padre Juan Carlos.
Además de esos encuentros privados, los Reyes se han visto con sus antecesores dos veces en público: con motivo de los funerales de Isabel II y en los de Constantino, hermano de la reina Sofía, que se celebraron en Atenas en enero del 2023.
Allí se pudo ver a Felipe besando tiernamente a su padre, imagen que fue la primera muestra de un proceso de reconciliación paulatino que, al parecer, tendría un objetivo claro, pues, según el libro ‘Mi rey venido a menos’, de la periodista francesa Laurence Debray –la única por la que se ha dejado entrevistar Juan Carlos en Abu Dabi–, su gran deseo es regresar a España: "Él espera poder morir en paz en su país".