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La joven ya ha hecho sus pinitos como actriz y desea seguir en la profesión.

La joven ya ha hecho sus pinitos como actriz y desea seguir en la profesión.

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Quiere vivir de su faceta de actriz, pero mientras se asienta en es profesión, algo nada fácil por los tiempos de crisis que vivimos, Carla Vigo busca trabajo como dependienta para poder pagarse los estudios de Arte Dramático, canto y baile. Asimismo, desea independizarse de sus suegros, porque en estos momentos vive con su novio en la casa de sus padres. La sobrina de la reina Letizia quiere alquilar con su chico un piso en la zona madrileña de Chueca. Que se sepa, no recibe ayudas monetarias familiares. Carla tiene muy poca relación con su regia tía y sus primas la princesa Leonor y la infanta Sofía, y tampoco es que vea habitualmente a su abuelo Jesús Ortiz.

Carla está muy enamorada de su novio y le gustaría irse a vivir con él:

Pendiente de un proyecto con los Javis

Hace unos días, la joven actriz, que acaba de intervenir en un cortometraje dirigido por la veterana Josele Román, aclaraba en sus redes sociales que "no recibo ni un euro de mi tía Letizia, vivo de lo que consigo trabajando, y espero que en el futuro pueda seguir haciéndolo sin tener que pedir dinero a nadie".

Daniel, un íntimo amigo de Carla, además de consejero y confidente, manifiesta que "ella está empezando en el mundo artístico, y es evidente que es un terreno muy difícil, y más en estos tiempos de crisis. Lo que ganó trabajando en la “Yerma” de Rafael Amargo le vino muy bien para pagarse las clases de Interpretación, canto y baile, pero mientras no le llamen para otros proyectos tiene que ganarse la vida como pueda. Está pendiente de una reunión con los Javis, y hay en el aire otros proyectos".

Carla Vigo, en un momento de su obra junto a Rafael Amargo.

Carla Vigo, en un momento de su obra junto a Rafael Amargo.

Lo mas probable es que la joven comience a trabajar como dependienta en una conocida tienda de lujo madrileña. Se están haciendo las gestiones pertinentes y hay una buena predisposición por ambas partes, pero existe un problema: en la empresa en cuestión temen que la presencia de Carla atraiga a los de paparazis que pudieran importunar a los clientes. 

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