Laura Ponte aprovecha su accidentado verano
Mientras espera los casi seis meses que tardará en llegar la intervención, Laura Ponte ha decidido no aminorar del todo el ritmo de su verano pese a la pérdida momentánea de la visión de un ojo que arrastra. La modelo ha pasado un fin de semana en Jávea con amigos antes de emprender otras tres escapadas a Galicia, Asturias y Mallorca.
Pese a la delicada dolencia que padece, la gallega se muestra muy esperanzada y está convencida de que va a recuperar la visión. Asimismo, cuenta con el apoyo incondicional de sus dos hijos, Luis Felipe y Laura, de 17 y 16 años respectivamente, fruto de su relación con el hijo de la Infanta Pilar.
Laura, de 48 años, sigue ejerciendo de modelo:
Eso sí, tal y como ha comentado la gallega, hasta su operación y posterior recuperación, "los médicos me pidieron vida tranquila, que no hiciera deporte, no hacer esfuerzos". Y ha explicado, con una sonrisa en la boca que "Mis hijos dicen que parezco un cyborg y que estoy muy guapa. A mí me da igual. A mí me da igual, de verdad, tener un ojo blanquito y cosidito".