Padre Ángel: "Carmen Sevilla era especial e insustituible"
El religioso recordó con una misa funeral a la que fue una de sus grandes amigas
El 13 de julio la iglesia madrileña de San Antón se llenó de amigos de la fallecida Carmen Sevilla, gracias a la misa en su recuerdo organizada por el padre Ángel, párroco de ese templo, que la organizó conjuntamente con Rappel, ambos íntimos amigos de la que fuera la novia de España.
"Carmen era una gran amiga y una mujer maravillosa"
"Siempre que se muere alguien que es amigo me acuerdo mucho de ellos, y Carmen era una gran amiga y una mujer maravillosa. Siempre me demostró un enorme cariño, a mí y a nuestra oenegé, Mensajeros de La Paz. La echaremos mucho de menos", asegura el padre Ángel.
PRONTO: Ella era muy especial.
PADRE ÁNGEL: Sin lugar a dudas, especial e insustituible. Es un privilegio haber tenido tan estrecho contacto con una persona tan buena como Carmen Sevilla.
P.: No se entiende que su hijo, Augusto Algueró, no le haya organizado a su madre la despedida popular que se merecía.
P.Á.: Hay que respetar su decisión, pero imagino que le hará algún homenaje más adelante.
P.: ¿Cómo te sentiste al conocer la noticia de esta muerte tan triste?
P.Á.: Me enteré en Roma y me dio mucha pena. Hubiese querido ir al tanatorio de Pozuelo a dar el pésame a su hijo, y dar un responso, pero me fue imposible.
P.: ¿Pudiste hablar con Augusto?
P.Á.: Desgraciadamente, no. La verdad es que no le conozco… Ni a él ni a nadie de la familia de Carmen. De todas formas, no tengo que pedir permiso a nadie para celebrar una misa por mi amiga.