Vuelve la tranquilidad a casa de Tamara Gorro tras una semana de lo más movida en la que la “influencer” ha tenido hospitalizados a sus dos chicos. Su marido, Ezequiel Garay, en Gijón a causa de una lesión; y su hijo, Antonio, en Valencia por una neumonía bilateral.
Afortunadamente, ambos se encuentran ya en casa y los cuatro miembros de la familia Garay Gorro vuelven a estar juntos. Eso sí, tal y como ha explicado Tamara, ella y su hija mayor, Shaila, “tienen que cuidar a los hombres de la casa y darles muchos mimos, para que pronto estén al 100%.
Haremos todo, pero JUNTOS”.
Tras siete días de absoluta locura, la colaboradora televisiva ha vuelto a recuperar la calma y se ha tomado un merecidísimo baño:
Mujer positiva donde las haya, Tamara ha querido verle la parte buena a todo lo ocurrido y ha compartido este bonito texto en el que reflexiona sobre la importancia de la salud: