Como le ha sucedido a todas las princesas plebeyas, Meghan ha visto cómo su pasado era investigado al máximo, cómo sus sexis posados juveniles se convertían en portada y cómo su familia se hacía famosa de la noche a la mañana. Esto último es lo que más la preocupa, pues entre sus parientes hay más de uno con problemas con la ley. En tu revista Pronto de esta semana te lo contamos todo.