Carlota Corredera amenaza con irse de Sálvame tras su pelea con Antonio Montero
La presentadora lanza un ultimátum en pleno directo por las opiniones lanzadas por el fotógrafo sobre Rocío Carrasco. Esto es lo que pasó en 'Sálvame'
El debate sobre la docuserie de Rocío Carrasco está presente en todas las conversaciones, y aunque no se esté hablando de ello, acaba saliendo. Esto es lo que pasó ayer en 'Sálvame', donde las cosas se pusieron muy tensas en plató tras lo que comenzaba siendo un debate sobre Jesulín.
Belén Esteban se levantaba para hacer uno de sus alegatos mirando a cámara en el que contestaba a la hermana de Olga Moreno. La madre de Andrea Janeiro aclaraba que ella sabía pedir perdón cuando se equivocaba. "Cuando me he equivocado de algo del padre de mi hija he tardado tres días en pedir perdón", ha dicho.
Ante esto, Antonio Montero opinaba que "A Jesulín se le ha calificado de mal padre toda la vida. O, ¿hay alguien que dude que, como padre de tu hija, es un mal padre? ¿Se puede decir que un padre es un mal padre o no se puede decir?".
Carlota Corredera amenaza con irse del plató si no lo hace Antonio Montero
Belén Esteban contestaba que su caso no era comparable al de Rocío Carrasco, pero el paparazzi acababa la frase que había empezado "Jesulín con su hija es un mal padre y para mí, Rocío con su hija es una mala madre". Algunos compañeros mostraban su desacuerdo con esta observación, mientras las cámaras enfocaban a Carlota Corredera saliendo de plató.
En realidad, la presentadora salía de plano para dirigirse a la dirección del programa. "Si Antonio Montero se queda en el plató, yo me voy. No voy a permitir que, después de todo lo que hemos contado, este señor se permita el lujo de llamar mala madre a Rocío Carrasco delante de mí. No lo voy a permitir".
Ipso facto, el colaborador accedió a marcharse. "Me voy yo", decía, a lo que Corredera respondía con un frío "Pues te lo agradezco". "Se acabó", sentenciaba la presentadora, mientras las cámaras enfocaban a Montero saliendo de plató.
Tras la marcha del paparazzi de 'Sálvame', la tensión se podía cortar con un cuchillo. "Esto no es un juego", sentenciaba Carlota para zanjar el tema, mientras sus compañeros permanecían sentados, sin palabras, antes de pasar a hablar del siguiente tema.