Exceso de alcohol: los peligros que conlleva. ¡Ponles freno!
El abuso de bebidas alcohólicas está relacionado con la muerte de tres millones de personas cada año en el todo el mundo. Este hábito es la causa de muchos fallecimientos prematuros, problemas cardiovasculares y cáncer
Aunque esta sustancia tóxica está muy presente en nuestra vida social, la ingestión de alcohol puede originar hasta doscientos trastornos. En nuestro país mueren 37.000 personas cada año por su consumo que, entre otras cosas, constituye el mayor factor de riesgo de muerte prematura y de discapacidad. No beber es lo más recomendable para la salud. Pero se considera un consumo moderado si un hombre adulto toma como máximo dos copas en un día (unos 20 gramos de alcohol, es decir, unas dos cervezas) y una mujer adulta no rebasa la copa diaria (unos 10 gramos del alcohol). Es mejor que este consumo se realice en las comidas.
Los efectos del exceso del alcohol a corto plazo
Beber en exceso altera el organismo a distintos niveles:
Pérdida de control. El alcohol afecta al sistema nervioso central y genera euforia y desinhibición de la conducta, lo que puede dar lugar a accidentes y a conductas irresponsables. Si la intoxicación es elevada, puede haber problemas de equilibrio, confusión, pérdida de memoria e incluso cuadros de amnesia.
Aumento de las grasas. El hígado es el órgano que metaboliza el alcohol. En este proceso produce acetato, una fuente de energía. Así, al beber, además de añadir azúcares que se convierten en grasas, el cuerpo no quema las existentes.
Deshidratación. Con la bebida se reduce la vasopresina, lo que lleva al riñón a eliminar hasta un 10% más de líquido del organismo.
Piedras en la vesícula: ¿por qué se forman y cómo evitar su aparición?
Más perjuicios para la mujer. Una enzima que transforma el alcohol es menos activa en el cuerpo femenino. Además, al pesar menos y tener más porcentaje de grasa, los niveles de alcohol en sangre aumentan, así como el grado de intoxicación.
Cuestión de género. Al cuerpo femenino le cuesta más metabolizar el alcohol por la falta de una enzima, tener más grasa y menos peso.
Riesgo de muerte. Cuando la ingestión de alcohol es muy elevada sus efectos pueden llevar al coma etílico e incluso a la muerte.
Los problemas que origina el abuso crónico de alcohol
Cuando el exceso de alcohol es constante los daños en órganos y tejidos pueden ser irreversibles.
Más enfermedades cardíacas. El alcohol sube la tensión arterial, favorece la aparición de coágulos y con ello puede aumentar el peligro de trastornos vasculares. Junto al tabaco, el consumo de riesgo se considera responsable de rigidez arterial precoz en más de un millón y medio de jóvenes españoles.
Pancreatitis. A nivel digestivo, el alcohol también es tóxico para el páncreas y su ingesta excesiva desencadena su inflamación.
Problemas de hígado: los mejores trucos para mantenerlo sano
Cirrosis hepática. El hígado para metabolizar el alcohol se agranda y genera tanto tejido de cicatrización que deja de funcionar normalmente.
Cáncer. El abuso de alcohol aumenta las posibilidades de sufrir cáncer de boca, faringe, laringe, esófago, estómago, páncreas e hígado. También supone más riesgo de cáncer de mama, colon y recto.
Anemia. La presencia del alcohol en la sangre reduce el número de glóbulos rojos, algo que resulta perjudicial en esta enfermedad que produce cansancio y dolores de cabeza entre otros síntomas.
Menos defensas. El alcohol también altera la producción de glóbulos blancos, con lo que se es más vulnerable a las infecciones.
Pérdida neuronal. Beber en exceso deteriora las neuronas y aumenta el riesgo de demencia y de enfermedades como el síndrome de Wernicke-Korsakoff en la que hay daños cerebrales.
Disfunción eréctil. El alcohol puede causar problemas en la erección.
Éstos son los grupos de mayor riesgo
Adolescentes. El cerebro de los adolescentes es muy vulnerable a los efectos del alcohol. También disminuye las hormonas sexuales y de crecimiento pudiendo afectar a su desarrollo. Sin embargo, en España, el consumo de alcohol se inicia a los 13 años y 1 de cada 3 adolescentes afirma haberse emborrachado los últimos 30 días. Además, beber a edades tempranas aumenta el riesgo de alcoholismo.
Consumo cero. Los adolescentes deberían abstenerse de consumir alcohol. Su cerebro es muy vulnerable a su toxicidad y también puede afectar su desarrollo.
Embarazadas. La ingesta de alcohol, por pequeña que sea, puede perjudicar el desarrollo cerebral del bebé, alterar sus capacidades cognitivas y causar malformaciones. También se considera que puede adelantar el parto y se asocia a bebés con menos peso al nacer. El consumo de alcohol durante la lactancia también debe ser cero, ya que éste pasa a la leche y afecta al bebé.
Verdadero o Falso
Existen numerosos mitos y fantasías alrededor del alcohol y sus efectos. En la mayor parte de los casos su objetivo llega a justificar este hábito como algo saludable. Pero no podemos olvidar que esta bebida es una droga.
El abuso de alcohol puede aumentar el riesgo de algunos tipos de cáncer.
El alcohol adelgaza
Falso. Nada más lejos de la realidad. El alcohol tiene un alto contenido calórico. Una de las bebidas con más calorías es el gintonic: aporta unas 210. Tampoco es fuente de nutrientes, pero sí de azúcar que se almacena en el cuerpo en forma de grasa. Por otra parte, beber nos lleva a comer sin control.
El exceso de alcohol con 40 años tiene más riesgos
Verdadero. A partir de esta edad aún es más importante reducir al máximo el consumo de alcohol. Un estudio ha comprobado que tomar más de dos copas al día aumenta hasta en un 34% el riesgo de sufrir un ictus. También parece que podría adelantar en cinco años la edad de aparición del primer accidente vascular.
¿Sientes fatiga e irritabilidad? Comprueba que no sea tu hígado
Los bebedores sociales no son de riesgo
Falso. Las personas que beben alcohol en eventos sociales, con amigos y familiares también pueden poner en riesgo su salud cuando superan ciertos niveles de consumo. De hecho, no beber es lo más seguro para el cuerpo. Incluso algunos estudios cuestionan los beneficios de tomar una copa de vino al día.
El botellón aumenta las enfermedades de transmisión sexual
Verdadero. Muchos adolescentes toman alcohol para vencer la timidez de forma que pierden el control y tienen relaciones sexuales sin tomar precauciones. Esto facilita el contagio de enfermedades y también es la causa de embarazos no deseados.