Isabel II, de 95 años, esconde sus serios problemas de movilidad

La longeva reina de Inglaterra era, hasta hace muy poco, la envidia de muchos nonagenarios, ya que, a sus 95 años, tenía una excelente forma física. Sin embargo, en algunas apareciones que hizo a principios de este 2022 ya pudo apreciarse que se ayudaba de un bastón para andar.

En el mes de febrero se contagió del COVID-19, lo que debió empeorar su ya frágil movilidad hasta el punto de que ahora se ve obligada a moverse, a ratos, en silla de ruedas. A pesar de ello, la soberana se niega a que el mundo la vea en esta situación.

En Westminster deberá andar lo mínimo

La obsesión de la reina por no aparecer en silla de ruedas ha provocado que se haya preparado un dispositivo especial para el 29 de marzo, día en el que se celebrará un multitudinario homenaje a Felipe de Edimburgo, que falleció el pasado 9 de abril, en la abadía de Westminster.

Está previsto que Isabel II salga en helicóptero del castillo de Windsor, en el que reside, hasta el Palacio de Buckingham y, desde allí, irá en coche hasta Westminster, que estará totalmente rodeada de pantallas de unos 2 metros de altura. La entrada a la abadía se producirá por una especie de túnel y no se descarta que la monarca llegue antes que el resto de asistentes. En caso de que tenga que andar, deberá realizar sólo unos pocos pasos.

En la cuenta de Instagram de la Familia Real británica la monarca aparece con bastón, pero nunca en silla de ruedas:

De esta manera, Isabel II evitara que se repita una imagen que la tiene obsesionada y es que, en agosto del 2001, con motivo del 101º cumpleaños de la reina madre, su hermana Margarita, que había sufrido un derrame cerebral que le dejó la mitad del cuerpo paralizado meses antes, fue fotografiada en silla de ruedas, algo que la soberana consideró indigno.

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