El príncipe Guillermo rompe una importante prohibición de Isabel II e imita al rey Felipe
El príncipe Guillermo ha dejado de lado una de las normas más importantes de su abuela, Isabel II

El príncipe Guillermo, en un imagen de redes sociales.
Durante los más de 50 años que duró el reinado de Isabel II, estuvo vigente una prohibición que venía directamente de la reina: no hacerse fotos con sus admiradores.
Ella nunca lo hizo en vida, pero parece que esta norma se ha quedado algo obsoleta. Y es que ahora todo el mundo lleva una cámara en su bolsillo, y la tentación de presumir en redes de haberte hecho un selfie con un royal es muy grande...

Taylor Swift con el príncipe Guillermo.
El reinado de Isabel II fue completamente diferente a cómo Guillermo está asumiendo sus funciones como heredero y príncipe de Gales: ahora tanto él como su mujer, Kate Middleton, apuestan por la cercanía, y esa medida pasa por fotografiarse en actos públicos con cuantos fans se lo piden.
El príncipe Guillermo, mucho más accesible que su abuela

El príncipe Guillermo.
"Guillermo pasa cada vez más tiempo fuera de casa y está encantado de posar para las fotos" explica Emily Ferguson, experta en realeza de The Express, en unas declaraciones de las que se ha hecho eco Vanity Fair. "Parece estar adoptando un nuevo enfoque en sus compromisos públicos", añade.

El príncipe Guillermo, como voluntario.
Esta complicidad con lo que Ferguson llama "la nueva generación Tiktok, que prefiere la narrativa visual", podría tener una explicación: que la gran brecha generacional (respecto al apoyo a la monarquía) que existe entre los mayores y la Gen-Z: "los más jóvenes están mucho menos inclinados a hacerlo", señala esta experta.
Felipe VI le lleva años de ventaja al príncipe Guillermo

Felipe y Letizia en su última visita juntos a Valencia.
Esta cercanía de la que hace gala el príncipe Guillermo es muy similar al comportamiento en público de Felipe VI.
De un tiempo a esta parte, nuestro rey se deja ver mucho más cercano a la gente, saludando, abrazando y haciéndose fotos en prácticamente todos sus actos públicos.