Las adversidades más duras pueden forjar las historias de amor más maravillosas. Fue lo que vivió la princesa Victoria, heredera del trono sueco. Salir de las garras de la anorexia le llevó a encontrar el amor de su vida: Daniel Westling, un joven y atractivo entrenador personal, sin estudios ni sangre azul, por el que luchó contra viento y marea y con el que ha formado una preciosa familia.
Su camino hasta el día de su boda, el 19 de junio del 2010, estuvo lleno de obstáculos que la pareja supo sortear y vencer. No te pierdas, esta semana en las páginas de la revista Pronto, la romántica historia que vivieron estos dos jóvenes que parecen sacados de un cuento de hadas.