Ana Guerra: “Es un poco antiguo tener hijos nada más casarse. Vamos a disfrutar del matrimonio”
La canaria Ana Guerra y su marido, Víctor Elías, han vuelto al trabajo sin disfrutar de luna de miel

Ana Guerra y Victor Elías
Los pasados 30 y 31 de octubre, Ana Guerra y Víctor Elías se convirtieron en marido y “marida” -como a ella le gusta que él la llame ahora—tras disfrutar de una doble boda, que consistió primero en una ceremonia religiosa con la familia y al día siguiente en una civil donde hubo risas, lágrimas y momentos inolvidables. Pero, aún con la emoción en el cuerpo, la pareja ha retomado su agenda laboral sin poder pensar siquiera en luna de miel.

Ana en una promo de Burger King.
De hecho, pudimos hablar con Ana Guerra en la presentación de la segunda edición de las hamburguesas creadas por Dabiz Muñoz para Burger King, donde, aún pletórica pero resignada, reconoció: “La luna de miel puede ser en cualquier momento. Antiguamente sabemos por qué existían las lunas de miel… Ahora ya todo es distinto. Víctor está en México, yo tengo trabajo, tengo un nuevo disco... hay mil cosas”.
La boda, dice, fue “infinitamente mejor” a lo que había soñado

Ana Guerra vestida de blanco mirándose al espejo.
PRONTO: ¿Lo habéis aplazado para otro momento?
ANA GUERRA: La idea es intentar escaparnos el próximo año, pero como lo habríamos hecho sin habernos casado.
P.: Ana, ¿el día de la boda fue como habías soñado?
A.G.: Mucho mejor, infinitamente mejor. El mayor consejo que recibimos fue que lo disfrutáramos porque todo pasa muy rápido. Tuvimos la oportunidad, como ya sabéis, de casarnos el día anterior y de tener ese momento familiar muy íntimo, cosa que nos dio la oportunidad el día siguiente de poder soltar un poquito a nuestras familias en ese día tan importante, porque ya lo habíamos tenido el día anterior.

Fran Perea y Ana Guerra son buenos amigos.
P.: ¿El momento más emotivo cuál fue para ti?
A.G.: Cuando entré y lo vi sentado el piano tocando para mí. Algo me olía, pero ya me había hasta olvidado de todas las cosas que habíamos organizado.
P.: ¿Alguna anécdota divertida?
A.G.: Para mí fue como todo perfecto. Fran Perea y Javier Márquez hicieron un show que no habíamos visto y que no teníamos ni idea. Ellos eran los maestros de ceremonia con una banda entera detrás y un coro de góspel.

P.: ¿Tenéis planes de maternidad a corto plazo o aún os veis jóvenes?
A.G.: Creo que es algo un poco antiguo que todo fuera tan seguido, ¿sabes? Igual que hemos disfrutado mucho de novios y de prometidos, ahora tenemos que disfrutar de estar casados.
P.: Oye, Ana, los reyes no pudieron estar, pero ¿os han mandado algún mensaje de felicitación, algún detalle?
A.G.: Eso, como comprenderás, quedará para nosotros.