Tras varios años intentando que su denuncia a Antonio David por maltrato psicológico fuese admitida a trámite, finalmente Rocío Carrasco se ha quedado sin respaldo legal, ya que ésta ha sido archivada por falta de pruebas por el Tribunal Supremo. El rechazo de esta instancia a continuar con la apertura del caso supone un gran varapalo para la hija de Rocío Jurado, ya que a partir de aquí no existe posibilidad de recurrir ni de reabrir la causa. Esta querella contra el exguardia civil fue interpuesta en 2017 por la madre de sus hijos y, un año después, ya en 2018, se dictó el sobreseimiento de la causa: esto quiere decir que, en caso de que hubiese nuevas pruebas, ésta se abriría y, en el contrario, se archivaría después de cinco años, que es lo que ha terminado sucediendo este martes 28 de noviembre.