Durek Verrett, marido de Marta Luisa de Noruega, se somete a diálisis 3 veces por semana para "seguir vivo"
El chamán Durek Verrett ha estallado contra un medio de comunicación noruego y, en su comunicado, ha hablado sobre sus problemas de salud

Marta Luisa de Noruega y el chamán Durek Verrett.
Desde que saltara a la fama por su relación y posterior compromiso con Marta Luisa de Noruega, el chamán Durek Verrett es un objetivo recurrente de la prensa del corazón, especialmente de las revistas de su país.
Y ahora, el hoy marido de la hija de Harald y Sonia de Noruega ha estallado precisamente contra una popular cabecera noruega, y lo ha hecho a través de un comunicado en redes sociales. De paso, en su texto, ha hablado como nunca de los problemas de riñón que sufre, que en su día le obligaron a cambiar su boda de fecha.

Marta Luisa de Noruega y su marido, el chamán Durek Verrett.
El chamán ha asegurado que se somete a diálisis tres veces por semana "solo para seguir vivo".
El duro comunicado de Durek Verrett, marido de Marta Luisa de Noruega

Durek Verrett y Marta Luisa de Noruega.
"Siempre he sido un objetivo de la prensa noruega, especialmente de Se og Hør. He sido cuestionado de maneras que han afectado a mi carácter, mi reputación, mi negocio y la gente que quiero, mi familia y amigos", arranca escribiendo el chamán.

Marta Luisa y Durek.
"Hoy, después de meses, la Asociación de la prensa noruega señala que Se og Hør ha violado la ética periodística en dos ocasiones. La primera, publicaron una foto mía desnudo sin mi consentimiento, alegando que era pública: no lo era, fue robada y vendida por alguien en quien confiaba. La segunda, publicaron una falsa historia de abusos basada en el testimonio de Joakim Boström, sin pruebas ni testigos ni comprobación de datos".

Marta Luisa y el chamán Durek Verrett.
Además de alegar que las acusaciones de abuso vertidas contra él fueron siempre falsas, el chamán ha explicado los problemas de salud que sufre, agravados según él por su dura situación con la prensa.
"Perdí un riñón hace años, y ahora me someto a diálisis tres veces a la semana solo para seguir vivo. Estos ataques no solo me han hecho daño emocionalmente, también me han hecho luchar más duro", ha señalado.