La familia de Edwin Arrieta: su reacción sobre la sentencia de Daniel Sancho
Después de un año de angustia e incertidumbre, ya se conoce la sentencia de Daniel Sancho por la muerte de Edwin Arrieta y la familia del fallecido está agradecida con el resultado

Daniel Sancho ha sido condenado a cadena perpetua por la muerte de Edwin Arrieta.
Daniel Sancho ha sido condenado a cadena perpetua. Al hijo de Rodolfo Sancho se le ha considerado culpable de los tres delitos por los que ha sido juzgado: asesinato premeditado, descuartizamiento y ocultación del cadáver, y destrucción del pasaporte del cirujano colombiano. El cocinero también ha sido condenado a indemnizar a la familia de su víctima con 106.000 euros.
Una condena que será recurrida por la defensa de Sancho, como anunciaron en los días previos a la lectura de la sentencia. Ahora, existen dos posibles vías de recurso, una al Tribunal de Apelaciones y otra al Tribunal Supremo, por lo que la sentencia definitiva podría alargarse todavía un año. ¿Y cómo se ha tomado el resultado la familia de Edwin Arrieta?
Darling Arrieta: "La muerte de mi hermano no quedó impune"

La familia de Edwin Arrieta se ha mostrado de lo más satisfecha con la decisión judicial, ya que lo único que querían es que 'Dios hiciese su trabajo', como habían confesado en numerosas ocasiones en los medios de comunicación.
De hecho, hace unas horas, toda la familia se dejaba ver en misa recibiendo el cariño y el apoyo de sus vecinos de Lorica tras haber recibido la noticia de la sentencia condenatoria a Daniel Sancho. Muy emocionados, Darling y sus padres se dejaban abrazar por todos ellos.

Por otro lado, Darling se ha sincerado con Telecinco, contando de primera mano cómo se encuentra tras conocer la cadena perpetua de Daniel Sancho: "Gracias a Dios, hubo justicia. Es lo que esperábamos. Fue la cadena perpetua y así el Señor nos lo ha concedido. Ahora mi familia podrá encontrar algo de tranquilidad entre el dolor".
También confiesa que "tuve sentimientos encontrados": "Lo primero que hice fue darle las gracias a Dios porque no nos dejó en vergüenza y ni nos abandonó. Lloré porque la muerte de mi hermano no quedó impune; porque mis papás van a tener un poquito de tranquilidad en medio de tanto dolor; y porque mi hermano ya puede descansar en paz".