Fantasmas en Cantora: a Isabel Pantoja le da terror quedarse sola en la finca
Este es el mayor miedo de Isabel Pantoja cuando pasa tiempo sola en su gran finca...

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Cantora lleva años siendo el principal quebradero de cabeza de Isabel Pantoja por muchísimas razones: por los porcentajes de propiedad que tiene sobre esta su hijo Kiko, porque no consigue venderla pero, a la vez, no quiere desprenderse de ella...
Ahora, según apunta Informalia, una preocupación más se ha añadido a esa lista: los fantasmas que, presuntamente, habitan en la finca. Y no nos referimos a los fantasmas del pasado de Isabel Pantoja... sino al término más literal.
Al parecer, tal es el miedo de la tonadillera a las almas errantes que vivirían entre los muros de su casa, que se niega en rotundo a quedarse sola en ella.
Isabel Pantoja tiene miedo de estar sola en Cantora

Cantora, que se encuentra entre Medina Sidonia y Vejer (Cádiz).
Ubicada en las afueras de la localidad gaditana de Medina Sidonia, la finca Cantora no tiene vecinos alrededor y actualmente, además, no cuenta con servicio doméstico día y noche, como sí tuvo en otras épocas.
Es por ello que Isabel rechaza la idea de pernoctar sola en su enorme casa. "Hace unos días, su hermano Agustín tuvo que cancelar un nuevo viaje a Madrid a ver otro de los chalet donde pretende instalarse porque ninguna de sus amigas (de las pocas que le quedan) podía viajar hasta Medina Sidonia a quedarse con ella", explica el citado medio.

¿Podría ser que este miedo a estar sola en su casa haya influido también a la reciente prisa que ha mostrado tener Isabel Pantoja por vender Cantora y que la ha llevado a rebajarla hasta casi la mitad?

El alguna ocasión, tal y como saca a la luz Informalia, Kiko Rivera ya había hablado en TV de los llamados "fantasmas de Cantora".
Hace algún tiempo, el Dj le explicó a Bertín Osborne que su hermana Isa, de niña, había protagonizado episodios paranormales de niña. "Yo nunca he visto ningún fantasma allí, pero mi hermana de pequeñita, sí. Ella se reía por las noches y un día me dijo mi madre 've a ver qué le pasa'. Cuando llegué estaba dormida", explicó Kiko en el pasado.
"Otro día la cuidadora de Isa le pidió a la niña que entrara en una habitación y ella se negó. Dijo que ahí estaba el hombre que le hacía reír por las noches. Era mi padre. La niña señaló al cuadro que hay en Cantora de mi padre", añadió también Kiko.