El pasado 1 de octubre José Ortega Cano sufría una aparatosa caída en el Metro de Madrid por la que tenía que ser ingresado de urgencia en un hospital de la capital. Tras realizarle diferentes pruebas que determinaron que afortunadamente sólo se había roto el húmero -la cosa podría haber sido mucho peor porque fueron varias las personas que le cayeron encima cuando la escalera mecánica se detuvo bruscamente provocando una 'avalancha' humana- el diestro recibía el alta acompañado por Gloria Camila y, con el brazo en cabestrillo, explicaba que se encontraba bien aunque dolorido, y adelantaba que en principio tendría que pasar por quirófano por su fractura.