María Teresa Campos, preocupada: no quiere que alguien muy importante se separe de su lado
Hay algo que ha empañado la reciente alegría de María Teresa Campos tras ser bisabuela. ¡Te lo contamos!
Estos están siendo unos días agridulces para la familia Campos: mientras Carmen Borrego celebra la llegada de su nieto Marc a principios de esta semana, al que aún no ha conocido debido a la difícil relación que tiene con su hijo, parece que hay algo que ha empañado la felicidad de María Teresa por convertirse en bisabuela.
La veterana comunicadora tampoco conoce todavía a su bisnieto, aunque ya sabe de su existencia: "Mi madre lleva años deseando ser bisabuela. Ya es hora de que recibiera una buena noticia, y la ha recibido por mi hijo", confesaba Borrego recientemente.
Ahora, el portal Look ha desvelado que, aunque María Teresa Campos no ha podido ver al recién nacido, sí que le han mostrado imágenes y que, incluso, fue el propio José María Almoguera, el feliz papá, quien la llamó personalmente para darle la feliz noticia.
Pero, a pesar de la felicidad que supone un nuevo bebé en la familia, lo cierto es que la comunicadora vive unos días muy tristes por otro motivo.
El gran temor de María Teresa Campos
Hay una persona ajena a su familia que últimamente preocupa mucho a María Teresa Campos: su chófer, Gustavo Guillermo.
Para la madre de Terelu y Carmen, su empleado más fiel es como un hijo, tal y como revela el citado medio, y "su mayor deseo es que la persona que más tiempo pasa con ella no se separe de su lado".
Desde que su salud comenzara a verse resentida hace algunos meses y sus hijas decidiesen cerrar filas en torno a ella, Gustavo "se ha erigido como una figura clave para ella prácticamente desde que se levanta hasta que se acuesta" y, en ocasiones, "no hay vida más allá de Gustavo", informa Look.