Rafa Nadal: su cara más desconocida
Ahora que acaba de convertirse en papá, queremos desvelarte el lado más personal de uno de los mejores tenistas del mundo
Rafa Nadal.
En cuanto sus carreras empiezan a brillar, los deportistas de élite son conscientes de que, un día, todo eso terminará. Y que, a partir de entonces, deberán empezar una nueva etapa. Otra vida. Sobre todo ahora que ha dado la bienvenida a su primer hijo, Rafael.
Y Rafa Nadal no es una excepción. Sigue siendo uno de los mejores tenistas del mundo, pero el mallorquín sabe que el tenis no es para siempre. Al menos, al nivel al que está jugando ahora... Así que, además de disfrutar intensamente de su tiempo libre (coches deportivos, un yate de lujo y alguna jornada de pesca y golf), Rafa divide su tiempo entre las causas solidarias, su fundación y otra faceta suya muchísimo más desconocida: la de inversor.
Las propiedades de Rafa Nadal, siempre cerca de su familia
Su primera vivienda en propiedad la adquirió en el 2012, en la República Dominicana. Una espectacular casa, en primera línea de playa, frente a los arrecifes de Playa La Romana, con 450 metros cuadrados y a escasos metros de la selva tropical, con paredes acristaladas, un salón comedor con acceso a los jardines, piscina y solárium, por la que el tenista pagó algo más de 500.000 euros.
Una imagen de las reformas previstas en uno de sus hoteles en el Caribe mexicano.
Once meses más tarde, Rafa adquirió una mansión de 1.200 metros cuadrados construidos sobre una parcela de 7.000 en la cala de Porto Cristo, en su Mallorca natal, también con espectaculares vistas al mar y por la que habría pagado algo más de 4 millones de euros (una "ganga", si tenemos en cuenta los 5,9 millones por los que se ofertaba en la inmobiliaria) y que se ha convertido en el refugio por excelencia del tenista, ya que muy cerca de allí viven sus padres, sus abuelos y sus tíos, sus pilares para seguir con los pies sobre la tierra y para que Rafa pueda seguir siendo aquel crío que, con 3 añitos, dejó patidifuso a su tío Toni manejando una raqueta como un auténtico crac.
La finca tiene 7.000 metros cuadrados y termina en un acantilado con unas vistas inmejorables.
"Pillado" cenando en su restaurante con el rey emérito, don Juan Carlos
Nadal también ha invertido 10 millones de euros en dos hoteles de lujo en Cozumel (México): el Secrets Aura Cozumel y el Sunscape Sabor Cozumel, a los que solía escaparse en cuanto tiene unos días libres porque el primero posee pistas de tenis propias, ideales para poder seguir entrenando. Y ha invertido 5 millones más en un apartahotel en cala Millor (Mallorca) que ha reconvertido en un hotel de lujo de cuatro estrellas operado por la cadena Iberostar.
El hotel totalmente renovado que Nadal posee en cala Millor (Mallorca)
Hace unos años, Rafa decidió lanzarse con algo nuevo e inauguró en Madrid el Tatel, uno de los restaurantes más "in" de la capital, que abrió en el paseo de la Castellana con otros socios: Pau Gasol, Enrique Iglesias, Rudy Fernández y Abel Matutes jr.
Aunque Nadal es poco dado a posar, ni siquiera para promocionar su propio local, aquella misma semana lo "pilló" una clienta mientras cenaba con el Rey emérito Juan Carlos de Borbón, uno de sus más fieles seguidores. "Siempre estoy en contacto con él, deseándole suerte y animándolo", reconoció una vez el padre del rey Felipe VI.
La foto que una clienta le sacó cenando con el Rey emérito.
Los últimos datos de la revista "Forbes" indican que los ingresos anuales del tenista manacorí rondan los 40 millones de dólares, entre jugar al tenis y, el resto, por publicidad y patrocinadores. Lo que sitúa a Rafa Nadal como el tercer tenista mejor pagado del mundo y la "celebrity" 80 en otra de sus famosas listas, por delante de estrellas como Bon Jovi o Angelina Jolie.
Un hombre solidario y "objeto de estudio" por un profesor
Claro está que Rafa se "regala" a sí mismo caprichos como un envidiable garaje de vehículos de lujo, que incluye un Aston Martin DBS gris de 517 CV y 250.000 euros, igualito al de James Bond; varios Mercedes deportivos; un Ferrari 458 blanco de 200.000 euros; una Harley Davidson XR1200... y su última adquisición: "Beethoven", un exclusivo yate de Monte Carlo Yatchs, de 23 metros de eslora y valorado en 3 millones de euros, del que sólo se fabrican 40 unidades al año y que, según dicen, Rafa se compró de segunda mano precisamente por el tiempo que se tarda en construir uno nuevo.
También le encanta conducir coches deportivos (arriba, con su Ferrari 458) y potentes motos.
"Siempre está hablando de comprarse un barco. Le encanta la pesca y el esquí acuático», contaba su hermana, Maribel Nadal, al diario británico "Daily Mail", en el 2012. Y, por fin, su sueño está ya en el puerto, y con él fondea no sólo por Mallorca, sino también por las mejores calas de Ibiza y Formentera, por las que tanto Rafa como su mujer, Xisca Perelló, sienten especial predilección.
En el año 2009, Rafa fue objeto de un estudio sobre liderazgo y dirección de personas titulado: "Rafael Nadal: el campeón y la persona". En él, Santiago Álvarez de Mon, profesor de IESE, analizaba al jugador y su entorno y destacaba la humildad del manacorí, su entorno de estricta confianza, su capacidad de superación y su solidaridad.
Una solidaridad que, hace ya muchos años, le inspiró para crear la Fundación Rafa Nadal, una oenegé que dirige su mujer, Mery Perelló, y que trabaja en distintos proyectos con una escena común, la integración plena de niños y adolescentes socialmente desfavorecidos a través del deporte, no sólo en España, sino también en Anantapur, una de las zonas más pobres de la India, donde mantiene una escuela de educación integral y un centro de entrenamiento de tenis en los que, desde el 2010, han ofrecido un futuro mejor a cientos de niños y niñas.
