Kiko Matamoros, expulsado de Supervivientes 2022
El tertuliano se convierte en el nuevo expulsado en la onceava gala del programa: así ha sido su adiós al programa
Kiko Matamoros se despide de 'Supervivientes' después de más de un mes de concurso.
Contra todos los pronósticos del resto de concursantes, Kiko Matamoros se ha convertido en el nuevo expulsado de la palapa de 'Supervivientes 2022'. Cuando comenzó el programa, el tertuliano admitió que le "ponía cachondo" que lo nominasen porque lo consideraba un chute de adrenalina y una forma de saber que tenía el apoyo del público. Pero ahora, después de muchas semanas salvándose, es el turno de que se encuentre con Marta Peñate en Playa Parásito.
El concursante se vio envuelto en una gran polémica la semana pasada, antes de la expulsión de Mariana Rodríguez, que podría haberle pasado factura. Kiko se dirigió a la superviviente con un comentario que el propio Jorge Javier Vázquez tachó de "xenófobo y clasista".
Kiko Matamoros: un concurso marcado por sus dificultades físicas
El colaborador de 'Sálvame' no ha resistido más en Honduras. A la votación del público se han sumado muchas dolencias y problemas físicos de Kiko Matamoros, que a sus 65 años de edad, ha tenido que renunciar a algunas de las pruebas individuales para no hacerse daño.
Kiko Matamoros y Yulen Pereira se enfrentaron en una de las nominaciones más ajustadas.
"Hemos tenido de todo, nos hemos dicho de todo. Me llevo a todos en el corazón, me llevo un recuerdo estupendo de esta travesía" ha comenzado, antes de despedirse. Ha dado las gracias al equipo médico y a sus hijas; a los primeros por entender las condiciones a las que se enfrentaba, y a las segundas por llevar la gestión de sus redes sociales y apoyarlo en las nominaciones.
Kiko Matamoros ha admitido que enfrentarse a unos concursantes "físicamente superdotados" era casi imposible y les ha dado un gran abrazo a todos. También ha bromeado con Ignacio de Borbón, al que ha llamado su amigo: "cuando tengas 30 años y yo 75, me gustará verte en mi casa y charlaremos". Además, a pesar de los conflictos que ha tenido en las últimas semanas con Nacho Palau, ha abierto las puertas a una reconciliación y a poder ser amigos cuando acabe el concurso.
Eso sí, antes de irse, le ha metido a Yulen Pereira el miedo en el cuerpo. Tras la visita de su madre, Arelys, el concursante se quedó trastocado porque le dio la sensación de que le ocultaba algo y que no le estaba gustando su relación con Anabel, pero que no quería contárselo. Además, ella fue muy sincera: su carpeta con la colaboradora de televisión le ha robado todo el protagonismo.