Combate la retención de líquidos en cinco pasos
Si quieres afinar tu silueta unos centímetros, sólo debes seguir estas sencillas pautas. ¿Preparada?
Para afinar nuestro cuerpo es necesario empezar a depurarlo desde dentro y eliminar así la retención de líquidos que nos da ese exceso de volumen.
Hidratación al máximo. Si quieres limpiar las toxinas que se acumulan en barriga, brazos, piernas, caderas, etc., tienes que beber un mínimo de 2 litros de líquidos diarios. No es necesario que sea sólo agua, puedes tomar infusiones depurativas, caldos vegetales y zumos naturales de fruta.
Sí a la fibra. Los alimentos ricos en ella reducen el porcentaje de grasa y ayudan a limpiar nuestro organismo, así que apuesta por los frutos secos, los cereales integrales, las verduras y las frutas para eliminar los líquidos retenidos.
¡Hay que moverse! Sí al ejercicio
La actividad física contribuye a eliminar la retención de líquidos, quema calorías y moviliza la grasa para eliminarla. Corre, salta, baila. Practicar 30 minutos de ejercicio aeróbico (caminar, correr, nadar, ir en bici, bailar, etc.) tres o cuatro veces por semana ayuda a mejorar la forma del cuerpo y reduce volumen.
Evita el sedentarismo. Vigila el tiempo que pasas sentada y procura moverte un poco cada hora. Te iría muy bien realizar en casa algunas flexiones y sentadillas para agilizar la pérdida de volumen.
Alíate con las cremas reductoras
Por sí solas no hacen milagros, pero son altamente eficaces si se combinan con dieta y deporte.
Efecto lipolítico y reafirmante. Búscalas así para que eliminen la acumulación de grasa y moldeen tu silueta, y que contengan ingredientes como cafeína, té verde, guaraná, algas, carnitina, centella asiática o vitaminas C y E.
Buenas prácticas. El uso de las cremas reductoras ha de ser continuado, una o dos veces diarias, y debes aplicarlas con un masaje circular, incidiendo sobre todo en caderas, muslos y cintura.
Plan de ataque a las zonas complicadas
Moldear la figura significa reducir volumen en general, pero hay partes del cuerpo que tienden a acumular más grasa. Te contamos cómo tratarlas específicamente.
Vientre. Aplícate la crema dos veces al día, mejor tras la ducha o antes de hacer ejercicio, ya que es cuando la circulación sanguínea aumenta. Para que penetre bien, combínala con un masaje circular en el sentido de las agujas del reloj.
Glúteos. Para combatir la celulitis, la flacidez y la grasa, usa reafirmantes con efecto "push up" y extiéndelas de forma vigorosa, en círculos y dirección ascendente.
Piernas. El exceso de volumen suele darse por la retención de líquidos, así que te irá bien usar un gel drenante, con efecto frío, que debes aplicarte del tobillo al muslo haciendo presión sobre la piel.
Brazos. Evita el descolgamiento y la grasa con una crema reafirmante. Úsala a diario y masajeando en sentido vertical, de abajo a arriba.
Acelera la eliminación de retención de líquidos
Ducha tibia-fría. Si cada mañana te das una ducha con agua templada y, luego, diriges el chorro de agua fría a las zonas con más volumen, lograrás un efecto similar al de un drenaje linfático para eliminar la retención de líquidos.
Crema de noche. Hay productos reductores y anticelulíticos que actúan cuando dormimos, ya que aprovechan el aumento de la circulación sanguínea que se produce durante la noche.
Café y sal, los mejores exfoliantes. Mantener la piel libre de células muertas ayuda a que las cremas penetren mejor. Hazte un masaje circular con los posos de café o un puñado de sal gorda, grandes anticelulíticos, sobre la piel húmeda.
Benefíciate de una ayuda extra
Alimentos que adelgazan. La piña, la sandía, el melón, la pera y la manzana tienen propiedades antiinflamatorias y diuréticas. En cuanto a las verduras que más ayudan a eliminar la retención de líquidos, apuesta por las alcachofas, los espárragos, las berenjenas, el calabacín, la cebolla y el apio.
Plantas ultradenantes. Potencia el efecto reductor de las infusiones incluyendo estos ingredientes con excelentes propiedades depurativas: té verde, diente de león, cola de caballo, jengibre, ginko biloba, hinojo, anís verde, boldo, ortiga, abedul, cardo mariano, alcachofera, etc.