Andreu Buenafuente nos descubre su lado más familiar
El conocido humorista y presentador prepara nuevos proyectos televisivos y acaba de publicar un libro infantil
Tras decir adiós el pasado mes de diciembre a "Late Motiv", el espacio que condujo en Movistar+ durante seis años, Andreu Buenafuente está inmerso en la producción de nuevos formatos para la pequeña pantalla. Mientras, incluso, tiene tiempo para escribir "La lista mágica de animales" (Ed. Destino), un libro de cuentos, ilustrado por Grillo en Casa (Marta y Noemí), sobre cómo dormir a los niños.
El humorista y su hija, Joana, aparecen retratados en la portada del primer álbum ilustrado del catalán, cuya mente inquieta y creativa nunca descansa.
"Silvia, leyendo cuentos, empieza a dormirse"
PRONTO: Imagino que tienes muchas anécdotas durmiendo a Joana. Cuéntame alguna.
ANDREU BUENAFUENTE: Te contaré una de mi mujer, Silvia. Yo soy el dormilón profesional de mi casa. Hasta hace poco, trabajaba de noche, llegaba a casa y empalmaba. A veces, Silvia, por equilibrio familiar, se ofrecía para acostarla, pero siempre venía mi niña en pijama y me decía: "Mamá se ha dormido y está diciendo cosas muy raras". Silvia tiene una habilidad única y es que, leyendo cuentos, empieza a dormirse y, lo que visualiza en ese duermevela, lo dice en voz alta. Entonces, mi hija está escuchando el cuento y, de golpe, el relato cambia, ja, ja, ja. Y Joana me pedía que le leyera yo.
Silvia y Andreu forman una pareja de lo más divertida:
"Mi hija se hará crítica en breve"
P.: Lo de contar ovejas, ¿está obsoleto?
A. B.: Forma parte de la cultura cultura popular, pero pienso que nadie lo ha hecho. Es más, creo que contar ovejas es, incluso, un poco perturbador, ja, ja, ja.
P.: ¿Qué ha comentado tu hija al ver el libro?
A. B.: Le ha gustado, pero es muy seria y ha dicho: "Sí, está bien". Creo que hará la crítica en breve, ja, ja, ja.
P.: Este libro cita e ilustra a cientos de animales. Si pudieras transformarte en uno, ¿en cuál lo harías?
A. B.: Es muy difícil, pero me habría gustado ser mi perro Mel, que ya murió. Era maravilloso y muy elegante, tenía mucha clase. Creo que era un señor disfrazado de perro.