Belén Esteban, antes y después de sus operaciones estéticas

La transformación de aquella Belén Esteban joven a la actual es indiscutible. A la colaboradora de ‘Sálvame’ los espectadores la conocieron mucho más delgada y con un rostro muy diferente, debido en gran medida a los cambios bruscos de peso y a los retoques estéticos, que se ha llevado a cabo en las dos últimas décadas. Repasamos con detalle la gran metamorfosis estética experimentada por la ‘princesa del pueblo.’

Belén Esteban: joven y enamorada de Jesulín de Ubrique

Han pasado más de 20 años desde que una Belén Esteban joven diera el salto a la popularidad por su relación sentimental con Jesulín de Ubrique. Aquella desconocida se convirtió en uno de los personajes más frecuentes en la prensa del corazón y los programas de crónica rosa.

Belén Esteban de joven presumía de figura atlética y un look acorde a su edad y a los tiempos, aunque era una mujer que huía de la sofisticación y el glamour excesivo. En 1998, cuando se hizo pública su relación con el torero, la madre de Andreíta solía llevar media melena, teñida siempre de rubio, con flequillo, y optaba por un maquillaje muy natural, en el que se resaltaban, sobre todo, los ojos.

Fueron años complicados para una Esteban joven, que no era bien recibida en el entorno familiar de su pareja. La tertuliana aparecía casi siempre enojada ante las cámaras, debido a su complicada relación con el clan de los Janeiro, sobre todo a raíz del embarazo y la llegada de la primera hija del diestro. Relación que, tras la ruptura de Belén con el diestro, fue totalmente nula, incluso tras la reciente muerte de Humberto Janeiro Belén se mantuvo totalmente al margen.

Belén Esteban y su primera operación estética

Al poco tiempo de traer a su única hija al mundo, la pareja decidió hacer caminos separados. Los desencuentros con el maestro torero y su ex familia política la convirtieron en un fenómeno televisivo. La del barrio de San Blas, que por aquel entonces rehizo su vida con Óscar Lozano, decidió hacerse una mamoplastia.

Belén nunca lo reconoció, pero, según algunas fuentes, dos años después se sometió a una liposucción de abdomen y una lipoescultura. Tampoco están reconocidos el aumento de labios y la reconstrucción dental que se llevó a cabo en 2006. Se produjo entonces en Belén Esteban un antes y después en su imagen física, a la que acompañó una llamativa bajada de peso.

Además, la de Paracuellos dejó atrás el flequillo, suavizó el tono rubio de su etapa anterior y se lo dejó más largo. Esteban, más segura de sí misma, se atrevió con estilismos más atrevidos, que estilizaban su figura. Su popularidad y talla le permitieron hacer sus primeros pinitos en el mundo de la moda desfilando al lado de maniquís consagradas como María José Suárez.

Belén Esteban, extrema y preocupante delgadez

Tras la ruptura de Lozano, la ganadora de ‘Gran Hermano VIP’ empezó a salir con Dani DJ y las largas noches de fiesta empezaron a hacer mella en su imagen física. Su extrema delgadez se convirtió en tema de conversación en programas de televisión, pero, sobre todo, el deterioro que se reflejaba en su rostro. Fueron muchos los que insinuaron supuestos coqueteos con sustancias que provocaban imágenes devastadoras de una Belén Esteban que parecía drogada.

Fueron años ajetreados y complicados, en los que se sucedieron la muerte de su padre, Francisco Esteban, cambio de representante tras dejar a Amador Mohedano y empezar una nueva etapa con Toño Sanchís e iniciar una nueva relación sentimental con Fran Álvarez, que en 2008 la llevó por primera vez hasta el altar.

El camarero, al que conocía de su juventud, fue hasta 2013 su compañero de vida y, pese a sus muchos desencuentros, a Belén Esteban le destrozó la muerte de su ex marido el pasado febrero.

Belén Esteban, operación de nariz y de ojos

El año 2009 fue muy especial para la tertuliana. Se estrenó en Telecinco ‘Sálvame’, un nuevo programa vespertino de La Fábrica de la Tele donde la madrileña tuvo desde el principio un sillón preferencial. El éxito del formato procuró a Belén Esteban mucha más popularidad de la que arrastraba desde hacía una década.

Fue también importante porque se celebró la Comunión de su hija y su relación con Fran iba viento en popa a toda vela. Gracias a su alto caché y a que su presencia en la pequeña pantalla parecía afianzarse del todo (fue elegida para presentar las Campanadas junto a Jorge Javier Vázquez), Belén decidió volver a ponerse en manos de sus cirujanos, en esta ocasión para someterse una rinoplastia y una blefaroplastia.

Esteban hizo gala de su nueva imagen en ‘Sálvame Deluxe’, en un pase que fue todo un éxito de audiencia. “Me han cambiado muchas cosas. ¡Tengo un subidón!”, le confesó al presentador. Preguntada por si volvería a hacerse algún que otro retoque, la entrevistada respondió afirmativamente: “Sí, en los dedos de los pies”.

Belén Esteban, drogas y rehabilitación

Después de tocar fondo tras la ruptura de Fran Álvarez, Belén Esteban decidió afrontar sus adicciones con la ayuda de especialistas. En su biografía, ‘Ambiciones y reflexiones’, la estrella televisiva relató con pelos y señales sus problemas con las drogas, una etapa muy dura que dejó claras marcas en su ya operado rostro. “Hubo un tiempo en que solo pensaba si mañana tendría para ponerme. En este mundo hay mucha droga, te la ofrecen por todos lados”, escribió en su libro.

Además, una Belén Esteban drogada terminó siendo asistida de urgencia en más de una ocasión como cuando ella misma se provocó un coma hipoglucémico al inyectarse la insulina más rápido de lo normal.

Por su hija y por ella misma, Esteban entró en rehabilitación, un proceso del que habló en otro ‘Sálvame Deluxe’ que arrasó en seguimiento. “Estaba metida en una espiral muy difícil, tenía muchas subidas y bajadas. Cuando salí pedí ayuda a Toño y a mi familia. Me ha costado mucho que confíen en mí. Ahora estoy orgullosa de lo que estoy haciendo”, desveló una Belén que había logrado subir de peso.

Apartada de la droga, la colaboradora empezó una nueva etapa vital junto a Miguel Marcos, con quien anunció su segunda boda y su hija Andrea Janeiro, convertida ya en toda una mujer. Desde entonces, Belén se hizo retoques estéticos mediante inyecciones de ácido hialurónico y vitaminas para reducir las marcas de expresión y las arrugas.