Julián Muñoz: todo sobre su herencia "envenenada"
El que fuera alcalde de Marbella, fallecido el 24 de septiembre, cargó en su entrevista póstuma contra Isabel Pantoja, la mujer que lo hizo famoso
Julián Muñoz durante su última entrevista.
No hubo que esperar 15 días para abrir el testamento y conocer la "herencia" que ha dejado uno de los personajes más peculiares de la política y el papel couché de este país, Julián Muñoz. Al día siguiente de que muriera, con 76 años, en una clínica de Marbella, en paz y acompañado por su familia, Telecinco emitió la última entrevista que el que fuera alcalde de Marbella y pareja de Isabel Pantoja, concedió a ‘¡De viernes!’.
La grabó a principios de septiembre, cuando ya sabía que el cáncer de pulmón que sufría no iba a darle mucho más tiempo de vida, y con la condición de que su larga conversación con Santi Acosta se emitiera cuando él ya no estuviera en este mundo.
Isabel Pantoja en Idol Kids.
No ha trascendido si cobró por ese último testimonio en el que habló de Isabel Pantoja, pero, viendo la audiencia que el programa logró, parecería que la entrevista ha sido el mejor "spot" para las memorias que Muñoz escribió y podrían publicarse pronto. Seiscientas páginas en las que explica cómo "viví a mi manera, pero no fue buena" y supondrá unos interesantes ingresos económicos para su viuda, Mayte Zaldívar.
Su segunda boda con Mayte
Julián inició su romance con Isabel, a la que quiso convertir en imagen de Marbella, estando casado con Mayte.
Porque, según ha dicho por activa y por pasiva, ha muerto en la ruina, sin un duro, pero feliz por los cuidados que, al final de su vida, ha recibido de su mujer (se volvieron a casar el pasado 30 de enero, aunque ella tiene pareja estable, Fernando Marcos, desde hace años), de sus hijas, Eloísa y Elia, y sus cuatro nietos. En pantalla, el ex edil no mencionó los 46 millones de euros que habría sacado de sus actividades corruptas en el consistorio y estarían en algún paraíso fiscal esperando ser recuperados por sus herederos. Por lo menos, es la leyenda, porque el dinero robado a los marbellíes nunca apareció.
La parte más envenenada de su "herencia" la ha recibido Isabel Pantoja, con la que tuvo una relación de cinco años y de la que dice que fue "mi perdición" y la mujer que "me dejó en la puta miseria. Cuando salí de la cárcel no tenía nada". Pero con la cantante hubo buenos momentos y explicó que, tras no poder contratarla para cantar en Marbella, se inventó que fuera la imagen de la ciudad.
"La conquisté por teléfono. Siempre que podía la llamaba y, al final, la buscaba como un adolescente con la testosterona por las nubes. Era una obsesión, como a los 20 años", contó de una relación que tuvo su primera noche de amor "en marzo del 2003. Fue en su habitación, sabíamos a lo que íbamos y fue un encuentro tierno, dulce, maravilloso. Nos teníamos ganas, había atracción física. Estuve toda la noche. Isabel es muy sensual y muy fogosa".
Muñoz con Isabel Pantoja y su hija Isa P.
Por ella dejó a su mujer, descuidó a sus hijas y se gastó todo lo que tenía. "Yo le daba dinero todos los meses. Entre unas cosas y otras me habrá costado unos 90 millones de pesetas", contaba Muñoz, detallando que, antes de enrollarse y para que no se fuera de gira por América, le dio 40 millones.
Ella se enamoró de aquel hombre con poder y dinero y, según Muñoz, vio la oportunidad de retirarse y vivir como una reina. El apartamento de Gaudalpín, que Pantoja declaró en su juicio haber comprado, se lo consiguió él trapicheando con un promotor y le construyó un estudio de grabación y le amuebló el chalet "La gitana", su nido de amor en Marbella.
Tan enamorados estaban que pensaron en tener un hijo. "Se hizo pruebas en la Teknon, de Barcelona", pero todo se enfrió cuando las cosas se torcieron y el dinero dejó de fluir. En el 2009, Isabel oficializó la ruptura con Julián y, desde entonces, la hostilidad fue absoluta entre ellos. Ella pasó dos años en la cárcel y él, finalmente, cinco.
La lección de Roca: "Hemos venido aquí a hacer dinero"
En un traslado a los juzgados cuando ya estaba en prisión.
En la entrevista, Julián arremetía contra Agustín Pantoja, al que calificó de ser "un bicho, que vivía del cuento y se pasaba las tardes viendo películas en el sofá". Más cariñoso fue con doña Ana, que describía como "una mujer que no daba problemas y estaba muy ocupada en sus rezos". También Isa Pantoja se ha librado de la escabechina, asegurando que su madre nunca se ocupó de ella porque estaba siempre de fiesta y que la niña tuvo la inmensa suerte de que Dulce la criara.
Isabel Pantoja, Mayte Zaldívar y Julián Muñoz se sentaron en el mismo banquillo de acusados. No se hablaron, ni se miraron.
Al margen de su bilis contra la Pantoja, Muñoz habló del expolio en el que fue arte y parte en Marbella: "Aparte de Jesús Gil, los que más dinero se llevaron fueron José Luis Sierra, que era el cerebro de todo, el que inventó las sociedades municipales; José Luis Giménez y Juan Antonio Roca. Yo los llamaba el clan de los visones, porque sus mujeres competían por ver cuál tenía el mejor abrigo de pieles".
Roca –uno de los pocos que asistió a su entierro– le repetía: "Aquí hemos venido a hacer dinero". Según Muñoz, "yo ganaba 50.000 pesetas por sociedad municipal y presidía 22, más los 5 millones al año por ser del GIL. Todo en B y Jesús Gil nos daba un millón de vez en cuando. A mí me regaló una casa y la vendí por 35 millones", le contó a Acosta, afirmando que él se habría librado de la cárcel si hubiera traicionado a Gil, colaborando con el juez que lo investigaba. No lo hizo porque le tenía mucho aprecio, afirmó, pero lo cierto es que ambos acabaron enfrentados tras ser compadres de robo y partido.
