La dieta antiinflamatoria y antiedad, 6ª entrega y última: evita el efecto yoyó
Si ya has perdido los kilos que querías, tu único objetivo ahora es evitar subidas de peso en el futuro. ¡Te mostramos cómo!
Esta semana termina el coleccionable de la Dieta Antiinflamatoria de tu Revista Pronto.
Mantener los buenos hábitos en la mesa es más fácil cuando te sientes a tope de energía, estás de buen humor y has conseguido, por fin, controlar los repentinos ataques de hambre. La comida ha dejado de gobernar tu vida y eso es muy buena noticia. Si ya has perdido los kilos que deseabas, felicidades. Tu único objetivo ahora es evitar subidas de peso. ¡No más sustos sobre la báscula!
La dieta Antiinflamatoria y antiedad sigue las bases de la dieta Mediterránea, por lo que puedes mantenerla de por vida siguiendo los consejos que te hemos dado desde la primera entrega e inspirándote en las propuestas culinarias que te hemos dado.
Como ahora tu cuerpo tiene un metabolismo más eficiente y sano, ha aprendido a no esperar tentempiés dulces cada poco rato y a quemar las reservas de grasas a modo de combustible. Preparar menús equilibrados, ordenados (recuerda: ¡primero lo verde!) y con mucha fibra es lo que te va a permitir no tener hambre a las pocas horas de levantarte de la mesa.
Aléjate de los tres enemigos blancos: el azúcar, la sal y la harina refinada
Si aguantas 4 o 5 horas con el apetito a raya y un buen nivel de energía y concentración, es que todo va sobre ruedas. Cuando necesites matar el gusanillo, bebe una infusión de regaliz o un café con una cucharadita de aceite de coco.
¿Tu estómago no se contenta con algo líquido? En ese caso, haz un tentempié de naturaleza salada: unas almendras tostadas, queso fresco, un huevo duro, un par de zanahorias, etc. Y los días que vayas a hacer alguna excepción –una copa de vino, un frito, un helado de postre, etc.–, bebe antes un vaso de agua con una cucharada de vinagre de manzana.
Otra de las estrategias que te ayudarán a mantener tu peso para siempre es alejarte de los tres enemigos blancos: el azúcar, la sal y la harina refinada. Malas compañías, ¡fuera!
En tu revista PRONTO, ya en el quiosco, encontrarás las opciones de entrante y plato único que hemos elaborado para ti esta semana.
