- Ingredientes
- • 4 pechugas de pollo
• 150 g de quinoa cruda
• 2 pimientos verdes
• 2 zanahorias
• 2 cebolletas
• 6 tomates maduros
• orégano
• azúcar
• aceite de oliva
• sal
• pimienta
Tiempo Total35 minutos
Preparación15 minutos
Cocción25 minutos
Coste € € €
Dificultad
Primer plato Tipo de plato
Vegetariana Tipo de dieta
Primavera Temporada
4 Porciones
266 kcal/ración Info nutricional
Pasos
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01.
Pela los tomates, pártelos por la mitad, retírales las semillas y corta la pulpa en daditos. Calienta 2 cucharadas de aceite en una sartén, añade el tomate y 1 cucharadita de azúcar y cuece a fuego lento durante 20 minutos, o hasta que el tomate esté frito. Al final, salpimienta y condimenta con orégano.
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02.
Enjuaga la quinoa y disponla en una cacerola. Vierte 2 vasos de agua (400 ml), añade una pizca de sal y lleva a ebullición. Cuando hierva, baja el fuego al mínimo y cuece durante 15 minutos o hasta que se haya absorbido el agua y la quinoa esté tierna. Deja que se enfríe a temperatura ambiente y separa los granos con ayuda de un tenedor.
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03.
Mientras, limpia los pimientos y las cebolletas, y raspa las zanahorias. Corta las hortalizas en daditos y saltéalas en una sartén antiadherente grande con un poco de aceite. Incorpora la quinoa y saltea durante 1-2 minutos más.
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04.
Salpimienta las pechugas de pollo y cuécelas a la plancha. Sírvelas cortadas en rodajas anchas, sobre la quinoa, y condimenta con la salsa de tomate.
El truco de Pronto
Si te desagrada la textura algo más seca del arroz o de la pasta integrales, incluye en tu dieta cereales de grano completo, como la quinoa, el mijo o el amaranto. Proporcionan más del doble de fibra y un arsenal de nutrientes de acción revitalizante.