Cistitis: descubre todos los consejos para prevenirla con remedios naturales
¿Sabías que hay que orinar cada dos o tres horas y vaciar la vejiga por completo? ¡Toma nota de todos los consejos para evitar la cistitis!
Se trata de la infección de orina más frecuente, sobre todo en mujeres, y llega a su pico más alto durante los meses de verano, ya que el calor propicia la proliferación de la bacteria que la causa.
¡Te contamos cómo puedes protegerte!
Este trastorno inflamatorio de la vejiga y las vías urinarias bajas afecta al 50% de las mujeres al menos una vez en su vida. También se da en los hombres, aunque en menor proporción, puesto que su uretra es más larga y a las bacterias les resulta más difícil llegar a las vías urinarias y provocar la infección conocida como cistitis.
Su prevalencia aumenta con la llegada del calor y, de hecho, los datos apuntan a que el 60% de la personas que padecen cistitis la sufren durante el verano.
Conocer sus factores de riesgo te ayudará a prevenir su aparición, a cuidar tu zona íntima y a evitar el riesgo de sufrir infecciones de repetición y que estas se acaben cronificando.
Señales de alerta y posibles causas
Cómo detectarla
Según datos del Centro de Información de la Cistitis, el 47% de los pacientes que padecen esta patología afirman tener picor o escozor, mientras que el 35% sufren un aumento en el número de micciones.
Los síntomas pueden sucederse con una intensidad variable y los más comunes son los siguientes: dolor o escozor al orinar o al mantener relaciones sexuales, necesidad urgente de orinar, micciones pequeñas y continuas, sensación de que la vejiga no se ha vaciado completamente, orina turbia y de color intenso y, en ocasiones, con sangre, picor vaginal, dolor abdominal y, en algunos casos, fiebre.
Qué la provoca
Los expertos apuntan a que el 80% de los casos están causados por la bacteria "Escherichia coli", que coloniza la vejiga y acaba infectando las vías urinarias.
En el caso de la cistitis intersticial, la infección no está provocada por ninguna bacteria y, aunque no se conoce exactamente su causa, se cree que está relacionada con factores hormonales, el uso de agentes irritativos sobre la zona (geles, ropa interior, etc.) o bien se debe a ciertas reacciones autoinmunes.
Otras causas de cistitis suelen ser la presencia de algunas patologías previas (como diabetes, cálculos renales o enfermedades de transmisión sexual) o bien estar embarazada o tener la menopausia, momentos en la vida de la mujer en los que está más expuesta a sufrir infecciones vaginales.
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Hábitos preventivos eficaces
Para evitar la aparición de cistitis y, sobre todo, que este tipo de infección se reactive en nuestro organismo, se deben tener en cuenta una serie de precauciones que pueden ayudarte.
¡Toma nota!
1. Mantén una higiene adecuada. Es muy importante lavarse la zona íntima una vez al día con agua y jabón de pH neutro y no usar ningún producto agresivo o irritante. A la hora de ir al baño, hay que limpiarse de delante hacia atrás, ya que el 80% de las bacterias que causan la cistitis provienen de las heces.
2. Mejor ducha que baño. Las bacterias suelen acumularse en el agua "estancada" de la bañera mientras que desaparecen con el fluir del agua al ducharnos.
3. No te aguantes la orina. Lo ideal es orinar cada dos o tres horas y, para asegurarte que vacías la vejiga por completo, hazlo con la espalda apoyada hacia atrás.
4. Bebe mucha agua. La hidratación logra mantener limpio el tracto urinario y evita que se acumulen en él gérmenes y bacterias.
5. Sí a los tejidos naturales. Evita la ropa ajustada, húmeda (como la de baño) y sintética, ya que facilita la aparición de infecciones. Procura utilizar ropa interior de algodón, ya que es transpirable y evita la humedad de la zona.
6. No abuses de los tampones. Durante la menstruación, combínalos con las compresas y cambia ambos con frecuencia, pues su uso prolongado favorece la humedad y la aparición de microorganismos.
Sexo e infecciones, un capítulo aparte
El 80% de los casos de cistitis se producen tras haber mantenido relaciones sexuales, ya que el coito facilita la entrada de bacterias en la uretra.
1. Incrementa la limpieza. Para evitar el riesgo de infección, se recomienda lavar con agua y jabón neutro la zona íntima antes y después de practicar sexo. También es importante orinar tras las relaciones para expulsar los posibles microorganismos.
2. Usa lubricación. Utilizar un lubricante al agua (nunca oleoso o grasiento) durante la penetración ayuda a evitar el roce excesivo y la consecuente irritación vaginal, que pueden llegar a provocar infecciones en la zona.
3. Ojo con los anticonceptivos. El riesgo de cistitis aumenta si la mujer usa un dispositivo intrauterino (DIU) o un diafragma o si se utilizan espermicidas.
4. Posturas recomendadas. Las laterales o aquellas en las que la mujer está encima son posiciones sexuales que limitan el riesgo de sufrir una infección.
Qué hacer para evitar recaídas
Entre el 25 y el 50% de los casos de cistitis suelen repetirse de manera frecuente, en cuyo caso, el urólogo podría iniciar otro tipo de tratamiento.
1. Conocer el motivo. Se suelen pautar pruebas complementarias (ecografía y/0 radiografía) para determinar qué provoca las infecciones y descartar posibles causas como piedras en el riñón, prolapso de la vejiga, etc.
2. Tratamiento preventivo. El especialista puede prescribir un antibiótico diario durante una larga temporada o antes de mantener relaciones sexuales para evitar recaídas.
Remedios naturales eficaces para combatirla
1. Ayúdate con la dieta. Te irá bien tomar probióticos (yogur, queso, etc.) y cítricos, ya que su acidez natural modifica el pH de la orina y favorece la eliminación de las bacterias. El ajo crudo es un gran antibacteriano y los arándanos rojos dificultan la adhesión de los microorganismos en las vías urinarias, así que… ¡que no te falten!
2. Infusiones antibacterianas. Las que más te ayudarán a limpiar tu organismo son aquellas depurativas y diuréticas, como la de cola de caballo, abedul, arándanos rojos, perejil o raíz de malvavisco. Toma unas tres tazas diarias y notarás los resultados en poco tiempo.
3. Baños de asiento. Si al agua le añades plantas con propiedades calmantes como el tomillo, el saúco y la caléndula, aliviarás enormemente el picor y el escozor de tu zona íntima. Hazlos cada vez que te sientas irritado/a y seca después bien la zona.
4. Alimentos laxantes y fibra. El estreñimiento es una causa habitual de cistitis, así que combátelo con frutas como el kiwi, las ciruelas y la banana, con frutos rojos, con legumbres y con verduras como las alcachofas, las endivias y la escarola.
5. Lo que debes evitar. Procura reducir el consumo de café, alcohol, té negro, tabaco y especias picantes, ya que resultan irritantes para la vejiga urinaria.