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Piel más fina y sin rastro de poros dilatados: ¡te contamos cómo!

Te contamos los secretos para cuidar tu piel y plantarle cara a esos molestos poros dilatados, ¡y con mascarillas que puedes hacer desde casa!

poros abiertos

Cuida la salud de tu piel para lucir un rostro suave, limpio y sano.

Nereida Domínguez

Todas queremos tener una piel suave y libre de imperfecciones. Es por eso que, cuando nos enfrentamos a un problema estético como los poros dilatados, encontrar una solución que se adapte a nosotras y que nos dé los resultados que buscamos puede parecer imposible.

Los poros dilatados son especialmente comunes en pieles mixtas y grasas, pero también los podemos encontrar en pieles muy secas y maduras por la falta de elasticidad que acarrean.

La principal razón por la que es difícil "deshacerse" de los poros es porque es imposible. Los poros son una parte natural de nuestro cuerpo que no podemos eliminar, pero eso no significa que no podamos minimizarlos para tener un cutis más liso y bonito.

¡Te explicamos cómo y te enseñamos las mascarillas caseras que te ayudarán a reducir su apariencia!

¿Qué significa tener los poros dilatados?

Los poros son los orificios de salida de las glándulas que producen el sudor y el sebo y son unas pequeñas aberturas que podemos encontrar en la parte superior de los folículos capilares. Cumplen numerosas funciones en nuestra piel (y no solo la de ser molestos), como por ejemplo, ayudan a que el cuerpo regule la temperatura corporal a través del sudor y eliminan toxinas.

En definitiva, son una parte esencial del funcionamiento de nuestra piel, para mejor o peor. El problema aparece cuando los poros son especialmente visibles porque están dilatados.

Se trata de algo meramente estético que, a nivel de salud, no afecta en nada. Pero para muchas personas, supone una inseguridad a la que les gustaría ponerle fin. Por desgracia, a veces se popularizan trucos y tratamientos que tiendan a empeorar la apariencia de los poros.

Pero no temas, porque tenemos la guía definitiva para minimizar la apariencia de los poros sin necesidad de recurrir a cirugías estéticas y sin productos milagrosos. ¡Sigue leyendo para saber más!

¿Cuál es la causa de los poros abiertos?

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Konstantin Postumitenko

Como ya hemos dicho, las pieles mixtas y grasas suelen tener los poros abiertos de forma natural, pero hay muchos factores que pueden causar que se dilaten más y sean más visibles.

- Seborrea

La seborrea, o la hipersecreción de sebo, es la sobreproducción de grasa en el rostro. Los poros producen sebo de forma natural y tienen sus propias funciones, pero en algunos casos, el exceso de sebo provoca que en zonas de mayor secreción, como la infame zona T, sean más pronunciados.

- Obstrucción de poros

A veces, los tratamientos y productos que utilizamos en el rostro pueden ser nuestra perdición. Ya sea porque no cumplen con la función que tienen o porque nuestra piel los rechaza, algunos productos pueden llegar a obstruir los poros y hacer que se dilaten más.

Otra causa relacionada con la obstrucción de poros es cómo eliminamos el maquillaje, la suciedad y las células muertas de la piel. La exfoliación es esencial para todo tipo de pieles, ya que así regeneramos la piel y evitamos que los poros estén sucios.

- Pérdida de elasticidad

El paso de los años también puede afectar negativamente a la apariencia de los poros, ya que la deshidratación y la pérdida de elasticidad pueden causar que estos se agranden y que su apariencia sea más notable.

¿Cómo podemos solucionar los poros dilatados?

En muchos casos, bastará con tener una rutina de belleza adecuada con unos productos que nos ayuden a tener la piel limpia y suave.

Por ejemplo, los principios activos como el retinol y el ácido hialurónico te sorprenderán por sus múltiples beneficios, entre ellos, los de combatir los signos de la edad y prevenir que los poros se agranden. Para pieles más jóvenes y que no sean sensibles, el ácido glicólico será una opción muy buena también.

La clave de unos poros minimizados: la limpieza

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francescoridolfi.com

Puede que te sorprenda, pero el cuidado de los poros no se beneficia de tiras limpiadoras para puntos negros o exfoliantes muy abrasivos con la piel. Estas técnicas y productos pueden ser muy negativas para la piel e incluso dañarla.

Al final, una de las claves para tener unos poros con una apariencia menos notable, es la limpieza, pero ésta se debe llevar a cabo a concienca y dos veces al día (por la mañana y por la noche), con productos que favorezcan una limpieza en profundidad y que no obstruyan los poros.

En cuanto a los exfoliantes, no todos son malos. Estos ayudan a la renovación cutánea y logran que el rostro se vea más suave y reluciente, pero no tenemos que utilizarlos de forma excesiva.

Además, otro de los beneficios de este paso es que ayuda a que los ingredientes activos y los productos en sí penetren mejor en la piel. Así que si utilizamos una crema específica o un tratamiento que ayude a minimizar los poros, el efecto se multiplicará.

También podrás combatir los poros dilatados con unas mascarillas caseras que te vamos a proponer a continuación. ¡Las tienes que probar!

Mascarilla de avena con huevo

Si tienes la piel grasa y con los poros abiertos, esta mascarilla se convertirá en tu mejor aliada. Además de ayudar a limpiar los poros en profundidad y a reducir la aparición de puntos negros, esta mascarilla también te ayudará a que la piel esté más igualada y suave.

Mezcla la clara de un huevo con un poco de avena y aplícala en la cara. Cuando notes que la mascarilla ya está seca, retírala con agua.

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Getty Images

Mascarilla de pepino

Ya conocemos los incontables beneficios del pepino en nuestra dieta, pero esta fruta puede ir más allá con esta mascarilla.

Tritura el pepino hasta que sea una mezcla de puré, añade una o dos cucharitas de limón y agua de rosas. Para lograr un efecto spa con esta mascarilla, impregna una toalla adecuada para el rostro con esta mezcla y déjala reposar sobre el rostro. ¡Verás qué relajante es esta combinación!

Mascarilla de bicarbonato de sodio

El bicarbonato de sodio se utiliza en muchas mascarillas caseras porque tiene un efecto impresionante en nuestro rostro. Lo que tendrás que hacer es mezclar una cucharada de bicarbonato de sodio con medio vaso de leche tibia y una clara de un huevo.

Para esta mascarilla, tendrás que utilizar un algodón, ya que así actuará mejor. Aplica la mezcla por el rostro con movimientos circulares durante un máximo de 15 minutos, aclara y continúa con el resto de tu rutina de cuidado facial (tónico, crema facial, etc).

Ya os lo hemos adelantado al principio: cuidar la piel para que esté suave y libre de imperfecciones, como los poros dilatados, no es tan fácil como parece. Al fin y al cabo, son una parte natural de nuestro cuerpo y no podemos eliminarlos, solo ser constantes con nuestra rutina para que no se obstruyan y estén limpios.

¡Seguro que estos consejos te ayudarán!

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