El rey Carlos III, obligado a retomar su quimioterapia tras probar un tratamiento de enemas de café
El monarca Carlos III interrumpió la quimioterapia para seguir la terapia Gerson, desaconsejada por sus médicos, y ahora su estado preocupa a Buckingham

Carlos III.
El rey Carlos III decidió interrumpir el tratamiento de quimioterapia que seguía desde que se le diagnosticó cáncer de próstata hace más de un año. Según reveló en exclusiva la periodista Concha Calleja en el programa 'Fiesta', el monarca optó por iniciar un tratamiento alternativo conocido como terapia Gerson, basado en enemas de café, zumos y suplementos.
“Durante tres semanas cada día un enema de café, luego 13 zumos al día, el máximo de litros que pueda. Es una limpieza absoluta”, explicaba Calleja, detallando además que el tratamiento incluye una inyección de extracto de bacalao y vitamina B12. Todo ello, por un coste aproximado de 4.900 euros semanales y 20.000 euros más por las inyecciones.
Carlos III apostó por una terapia alternativa sin base científica

Carlos III de Inglaterra, en una imagen de sus redes sociales. Foto: @theroyalfamily.
A pesar de las advertencias de sus médicos, el rey decidió suspender la quimioterapia para probar esta controvertida terapia, que ya defendió públicamente en 2004. Sin embargo, los efectos no han sido los esperados. Según la misma fuente, el tratamiento le ha sentado mal y el cáncer no ha remitido.
"Ha estado efectivamente ingresado como explicaban esta semana desde palacio, ellos han intentado quitarle gravedad al asunto, pero lo que a mí me cuentan es que lleva ya dos semanas sin acudir al hospital a recibir el tratamiento que le aconsejan los médicos", aseguraba Calleja en el programa de Telecinco.
Carlos III: el monarca ya habría retomado la quimioterapia

El rey Carlos III de Inglaterra en una imagen de archivo.
Aunque la Casa Real británica ha intentado restar importancia a la situación, fuentes cercanas al entorno del rey confirman que Carlos III ha retomado la quimioterapia al comprobar que su estado de salud no ha mejorado con la terapia Gerson.
La noticia ha generado preocupación en el Reino Unido, ya que el monarca había mantenido una actitud optimista desde el diagnóstico. No obstante, su decisión de apostar por tratamientos no científicos ha derivado en una etapa complicada de su lucha contra el cáncer.